texto argumentaivo de la salud respiratoria
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Las enfermedades del sistema respiratorio representan una de las primeras causas de
atención médica en todo el mundo, tanto en la consulta ambulatoria como en la internación, y se
encuentran entre las primeras causas de mortalidad. Estas enfermedades afectan a toda la
población pero, fundamentalmente, a los menores de 5 años y a las personas de 65 años y más.
Una proporción importante de las consultas, hospitalizaciones y muertes por enfermedades
del sistema respiratorio es de origen infeccioso y, entre ellas, la neumonía, la enfermedad tipo
influenza y la bronquiolitis son las enfermedades respiratorias de mayor frecuencia y gravedad.
Junto a otras enfermedades respiratorias de origen infeccioso como la otitis, la faringitis y la
bronquitis, se engloban en un grupo de infecciones respiratorias agudas (IRA) que representan la
primera causa de consulta a los servicios de salud.
Estas afecciones pueden ser prevenidas con medidas de higiene (lavado de manos, aseo del
hogar), aislamiento respiratorio y, sobre todo, la aplicación de vacunas (antigripal, antineumococcica,
trivalente bacteriana).
Explicación:
Respuesta:
Las enfermedades del sistema respiratorio representan una de las primeras causas de atención médica en todo el mundo, tanto en la consulta ambulatoria como en la internación, y se encuentran entre las primeras causas de mortalidad. Estas enfermedades afectan a toda la población pero, fundamentalmente, a los menores de 5 años y a las personas de 65 años y más.
Las enfermedades respiratorias crónicas son afecciones del pulmón o las vías respiratorias que, una vez adquiridas o desarrolladas, no pueden curarse, sino solamente tratarse para mejorar la calidad de vida de quien las sufre. Las más importantes son el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la rinitis alérgica y la hipertensión pulmonar.
Las enfermedades respiratorias crónicas se originan principalmente por:
- Fumar
- Contaminación del aire en espacios cerrados (por humo de tabaco, otros tipos de combustión o gases)
- Contaminación ambiental por escapes de automóviles o industrias
- Inhalación de polvos, gases y otros productos químicos en el lugar de trabajo
- Predisposición genética
Posiblemente, tenemos poco control sobre el aire que respiramos por fuera de nuestras viviendas o lugares de trabajo, pero aprender más sobre la calidad del aire de nuestro entorno y su impacto en la salud puede ayudar a las personas a encontrar la mejor manera de evitar la exposición y protegerse .