TAREA DE PRACTICAS DEL LENGUAJE-castellano- .
ACTIVIDAD DIAGNÓSTICO
LUEGO DE LEER EL TEXTO , RESOLVER :
1. extraer del texto sustantivos,adjetivos y verbos (diez ajemplos de cada uno).
2. realiza segun tu imaginacion la descripcion de : la joven,el anciano y la casa del sueño).
3. inventar un nombre a la historia y explicar su elección .
4. extraer tres oraciones y separar las en sujeto y predicado .
5. ¿qué sensación te provocó el cuento?
6. realizar un final diferente a la historia .
{texto en la imagen✔}
Respuestas a la pregunta
Texto a analizar:
Una joven soñó una noche que caminaba por un extraño sendero campesino, que ascendía por una colina boscosa cuya cima estaba coronada por una hermosa casita blanca, rodeada de un jardín. Incapaz de ocultar su placer, llamó a la puerta de la casa, que finalmente fue abierta por un hombre muy, muy anciano, con una larga barba blanca. En el momento en que ella empezaba a hablarle, despertó. Todos los detalles de este sueño permanecieron tan grabados en su memoria, que por espacio de varios días no pudo pensar en otra cosa. Después volvió a tener el mismo sueño en tres noches sucesivas. Y siempre despertaba en el instante en que iba a comenzar su conversación con el anciano.
Pocas semanas más tarde la joven se dirigía en automóvil a una fiesta de fin de semana. De pronto, tironeó la manga del conductor, y le pidió que detuviera el automóvil. Allí a la derecha del camino pavimentado, estaba el sendero campesino de su sueño.
—Espéreme un momento —suplicó—, y echó a andar por el sendero, con el corazón latiéndole alocadamente.
Ya no se sintió sorprendida cuando el caminito subió enroscándose hasta la cima de la boscosa colina y la dejó ante la casa cuyos menores detalles recordaba ahora con tanta precisión. El mismo anciano del sueño respondía a su impaciente llamado.
—Dígame —dijo ella—, ¿se vende esta casa?
—Sí —respondió el hombre—, pero no le aconsejo que la compre.
¡Un fantasma, hija mía, frecuenta esta casa!
—Un fantasma —repitió la muchacha—. Santo Dios, ¿y quién es?
—Usted —dijo el anciano—, y cerró suavemente la puerta.
1. extraer del texto sustantivos, adjetivos y verbos (diez ajemplos de cada uno).
■Sustantivos: noche, sendero, colina, cima, casita, jardín, placer, puerta, hombre, barba, sueño.
■Adjetivos: extraño, boscosa, hermosa, blanca, anciano, larga, sucesivas, pocas, pavimentado, campesino, menores, impaciente.
■Verbos: soñó, caminaba, ascendía, ocultar, llamó, abierta, empezaba, despertó, pensar, tener, despertaba, comenzar, dirigía, tironeó, pidió, detuviera, estaba, andar, vende, respondió, aconsejo, compre, frecuenta, repitió, es, dijo, cerró.
2. realiza segun tu imaginacion la descripcion de : la joven,el anciano y la casa del sueño).
■Una mujer joven, de mediana estatura, pelirroja, con pecas y con mirada traviesa y alegre.
■Un anciano con pelo blanco, cubierto con una boina negra y larga barba blanca, muy alto y recio, muy serio y con mirada triste.
■Una casita blanca con tejado rojo y chimenea, con puerta de roble con aldaba de bronce y con ventanas con contraventanas también de roble.
3. inventar un nombre a la historia y explicar su elección . La casita soñada.
Lo más importante de la historia es la casita, y el sueño, que ha permitido que se reunieran dos personas que no se conocían.
4. extraer tres oraciones y separarlas en sujeto y predicado .
Una oración es una estructura que posee sentido completo. Se llama oraciones bimembres a aquellas que están compuestas por un sujeto (quien ejecuta la acción) y un predicado (que contiene la información sobre la acción que se realiza). El verbo (expresa la acción y siempre estará presente dentro del predicado).
Sujeto subrayado y predicado en negrita:
①Una joven soñó una noche que caminaba por un extraño sendero campesino. Sujeto (Una joven) Predicado (soñó…)
②La joven se dirigía en automóvil a una fiesta de fin de semana. Sujeto (La joven) Predicado (se dirigía…)
③El mismo anciano del sueño respondía a su impaciente llamado. Sujeto (El anciano) Predicado (respondía…)
5. ¿qué sensación te provocó el cuento?
Esa sensación triste que me provocan todas las historias de fantasmas, pero mi final alternativo me parece mucho más alegre y realista. No creo en fantasmas y sí en cuentos con final feliz.
6. realizar un final diferente a la historia .
—Discúlpeme —dijo ella— ¿es usted el dueño de esta casa?
—No —respondió el anciano— la dueña era mi hija, pero se casó y marchó hace muchos años. ¡Tú te pareces mucho a ella, jovencita!
Mi madre se llamaba Gregoria y murió de cáncer el año pasado —dijo la joven—
¡Eres mi nieta! —exclamó el anciano—, tendiendo los brazos a la joven.
¡Abuelito! —exclamó la joven—, y se abrazaron emocionados.