seis soluciones para ir mejorando la comprensión lectora
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La comprensión lectora es una competencia esencial para la vida y por ello debemos asegurarnos que los alumnos la desarrollan de forma significativa. Gracias a ella seremos capaces de resolver problemas de matemáticas, comprender las instrucciones de un juego, reflexionar acerca de una noticia en el periódico o, simplemente de disfrutar leyendo. Por lo tanto abordar la comprensión lectora en el aula es de vital importancia. No te pierdas este artículo porque encontrarás estrategias muy interesantes. ¡Adelante!
Estrategias comprensión lectora - Tiching
En la sociedad de la información y la comunicación en que vivimos necesitamos dotar al alumnado de estrategias y recursos para poder seleccionar, destacar, analizar, comprender y resumir la información a la que tenemos acceso. Es una tarea que conlleva tiempo y dedicación, pero que es necesaria para adquirir conocimientos y descubrir la realidad que nos rodea.
La comprensión lectora requiere de complejos procesos neurológicos y por ello debemos asegurarnos que el alumno o alumna tiene una capacidad madurativa adecuada. Asimismo, cada niño y niña tiene su ritmo de aprendizaje y una manera distinta de aprender. Por eso te damos algunos consejos a tener en cuenta:
Propón actividades que partan del interés del alumno y donde este sea el protagonista activo del aprendizaje.
Revisa los conocimientos previos de los alumnos para personalizar el aprendizaje, en la medida de lo posible.
Plantea espacios de lectura donde el ambiente sea de confianza y tranquilo para promover la atención y la concentración.
Varía el tiempo dedicado a la actividad dependiendo de la edad de tus alumnos y alumnas: su capacidad de concentración también cambia con los años.
Facilita a tus estudiantes distintas tipologías textuales, ya que cada uno requiere un grado de comprensión diferente.
Divide la tarea en pequeños pasos significativos si es muy compleja.
Potencia la metacognición para hacerlos conscientes de su propio proceso de aprendizaje.
Algunas ideas para comenzar
Con estas premisas, te proponemos algunas estrategias que puedes utilizar en el aula para trabajar significativamente la comprensión lectora:
Leer recetas, instrucciones, prospectos, el menú de un restaurante… Estas lecturas serán geniales para que el niño o niña empiece a comprender lo que dice el texto, ya que se conforman de frases muy cortas que deben ir asumiendo poco a poco.
Procedimiento Cloze (palabra fantasma): Esta actividad consiste en escoger un texto adecuado a la edad de tus alumnos y eliminar algunas palabras. Los estudiantes deberán colocar las palabras para que el texto tenga un sentido. Puedes regular el grado de complejidad según las características del grupo, dándoles las palabras desordenadas o bien dejándoles que creen su propio texto.
Escribir finales alternativos: Se trata de una propuesta que permite desarrollar la comprensión lectora y a la vez la creatividad, ya que deben conocer muy bien la historia que se presenta para poder plantear un final diferente al de la historia real
Explicación:
no me copien
Respuesta:
Consejos para mejorar tu comprensión lectora.
Lo más importante: LEER.
No tengas prisa.
Analiza constantemente el texto que lees.
Busca el significado de las palabras que no entiendas.
También puedes utilizar diferentes técnicas para mejorar tu comprensión lectora.
Técnica 1: El periodista.
Consiste en leer un texto realizándote las preguntas típicas que haría un periodista: ¿qué? ¿cómo? ¿cuándo?, etc. Cuando las formules deberás rellenar un cuadro con tres columnas: una para lo que sucede en el texto (qué), otra para quien lo lleva a cabo (¿quién?) y otra para las circunstancias en las que sucede (¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Por qué?) Al final la información quedará estructurada por segmentos que al unirlos darán un sentido completo al texto.
Técnica 2: Mapas conceptuales.
Esta es, sin duda, una técnica estupenda para diseccionar el texto, completar definiciones y comprender el papel que juega cada concepto dentro del mismo. En esta técnica también es muy sencillo hacerse una idea de cómo están interrelacionadas las diferentes partes del texto principal.