¿Quiénes podrían determinar si un texto tiene valor literario o no, si es un buen cuento o si "todavía le falta"?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Una obra literaria tiene un valor estético en sí misma, que hace que sea apreciable, valorable o medible en cualquier momento, pero también está sujeta a los valores estéticos de la época, del lector o del crítico que determinan lo que está escrito con arte y lo que no. El paso del tiempo es quien dicta este asunto.
Así pues, se suele admitir que para que un texto tenga valor literario debe reunir las siguientes características: intención del autor en realizar una creación estética; uso de un lenguaje literario, lo que no significa que tenga que estar cargado de figuras retóricas o de vocablos cultos y poéticos; validez universal, esto es, que no vaya dirigida a una sola persona (receptor individual), sino a un público general y desconocido (receptor universal); destinada a gustar, a proporcionar un placer estético por encima de consuelo, alegría, información o formación.
¿Qué es lo que convierte una obra literaria en buena, mala o regular?
A lo largo de los siglos se han dado respuestas muy variadas a esta pregunta.
1.- La profundidad del conocimiento,
2.-la verosimilitud,
3.-la unidad formal,
4.-el atractivo universal,
5.-la complejidad moral,
6.-la inventiva verbal,
7.-la visión imaginativa.
Para algunos críticos, la originalidad tiene mucho peso.
Cuanto más rompa una obra con la tradición y la convención e inaugure algo verdaderamente nuevo, más probabilidades tiene que le demos una buena valoración. Varios poetas y filósofos románticos mantuvieron este punto de vista.
Sin embargo, si nos paramos a pensarlo un momento, seguro que nos surgirán dudas. No todo lo nuevo vale la pena.
Tampoco es cierto que toda la tradición sea sosa y aburrida. Hay tradiciones honorables.
Una herencia puede ser revolucionaria del mismo modo que puede resultar retrógrada.