que quiere decir la palabra vive una crisis similar a la de entreguerras y queda como carcasa hueca cuando su significado es alterado según quien la diga
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Una consultora líder mundial en tecnologías de la información, Gartner, sostiene en su último informe que en el 2022 el público occidental consumirá más noticias falsas que verdaderas y que no habrá suficiente capacidad ni material ni tecnológica para contrarrestarlas. ¿Quién lo dice? Gartner, con sede en Stamford, tuvo como mayor accionista a la compañía de capital riesgo Silver Lake, participada por varios gigantes de la informática que siguen manteniendo sus posiciones en el consejo directivo. ¿Cómo saber si una noticia sobre ‘fake news’ puede ser también una fake new o un vaticinio interesado?
Las informaciones circulan tan masiva y aceleradamente en las redes sociales que tendemos a agarrarlas y retransmitirlas con el mismo instinto compulsivo que el de un jugador de ping-pong: las capta y rebota, sin detenerse a comprobar su veracidad. Cuando el ritmo de las comunicaciones iba a paso de diligencia o de telégrafo, había más noticias falsas que en la actualidad, con consecuencias a veces trágicas, difíciles de revertir, aun después de haber sido comprobada su falsedad. Hay personas que aún creen en El protocolo de los sabios de Sión, un texto redactado por la policía zarista y atribuido a los judíos para justificar los pogromos.
Hoy es cierto que las fake news proliferan y se reproducen a gran velocidad, pero, a diferencia de otras épocas, es más fácil desmentirlas. A pesar de ello, el periodismo riguroso tiene dificultades para hacerse oír entre el griterío.
Palabras de doble lengua
No sólo hay noticias falsas, las técnicas de simulación de la realidad llegan también a la imagen en un mundo que se ha acostumbrado a no distinguir la realidad de la ficción, en literatura, cine, televisión o en las redes sociales. La palabra vive una crisis similar a la de entreguerras y queda como carcasa hueca cuando su significado es alterado según quien la diga. En Catalunya, palabras o conceptos como democracia, nazi, Estado de derecho, nacionalismo, dictadura, legitimidad, ley, autoritario, exclusión, libertad, presos políticos... han quedado huérfanas del pacto social que fijaba sus contenidos para que todo el mundo se entendiera al emplearlas.
Iván de la Nuez afirma que “la historia ha demostrado que Orwell y no Marx es quien tenía razón”, no sólo por el triunfo de la sociedad vigilada, el Gran Hermano permanente de internet, sino también por la perversión de las palabras. Orwell habla en su libro 1984 del doublespeak y el doublethink Xenófobos o autoritarios ejerciendo la xenofobia o el autoritarismo en nombre de la democracia y la tolerancia. En los mapas europeos que muestran el auge de fuerzas autoritarias y excluyentes, suele verse todo el continente coloreado en diversos tonos, menos la península Ibérica, que aparece en blanco. ¿Dónde están la extrema derecha y el populismo en España? En Twitter las fake news ayudan a cultivar el odio. Y en muchos casos, el odio étnico.
“Si no compartes, no es noticia”
“Si no sale en la tele, no existe”, solían decir los publicistas. Ahora, el lema es otro: “Si no la compartes, no es noticia”. El tuit, comentario en Facebook o vídeo en YouTube que no se comparte está condenado a no dejar huella. Es fácil distinguir los bots que han invadido Twitter, activados por una empresa o un partido político para apoyar a sus clientes o denigrar a sus rivales, pero, una vez visto el truco, van mutando rápidamente para camuflarse mejor. Hoy es posible que uno discuta con un robot o sean los robots quienes debatan con otros robots. Un detalle más para la confusión del ser humano con la inteligencia artificial.
La verificación de las noticias a cargo de profesionales solventes es cara; por eso, en una reciente visita a Barcelona, el músico Brian Eno no dudó en afirmar que el buen periodismo se ha de pagar. “Si es barata, no es noticia”.
Monique Leibovici: “Los hechos no importan, sólo las opiniones”
Explicación: