Qué otras opciones existen además del glifosato para fumigar los cultivos?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
¿Por qué no usar herbicidas químicos?
Explicación:
El 90% de los herbicidas utilizados en nuestro país, bajo 125 marcas aprobadas, contienen como principio activo el Glifosato. Estos herbicidas se vienen aplicando, con permiso e incluso promoción, por parte de las administraciones competentes, en espacios públicos tales como bordes de carreteras, líneas de servicios, aceras, jardines y parques.
En marzo de 2015 la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado al Glifosato como materia activa “probablemente cancerogénica” tras la publicación por parte de la Agencia de Investigación sobre el Cáncer (IACR) de un amplio estudio que demuestra que esta sustancia favorece la aparición de Linfoma No-Hodgkin en humanos y causa daños en el DNA además de provocar cáncer en animales de laboratorio. En concreto, los estudios publicados por 17 expertos señalan la relación de esta sustancia con 4 tipos de cáncer: hepático, riñón, páncreas y linfoma.
Los riesgos han sido evaluados basándose en estudios de exposición agrícola llevados a cabo en particular en Estados Unidos y Canadá, así como en animales en laboratorios. Pero la IARC, indica haber tenido en cuenta igualmente los trabajos de la agencia estadounidense de protección medioambiental que, tras haber clasificado el glifosato como “cancerígeno posible para el hombre” en 1985, dio marcha atrás en 1991.
Además el glifosato está vinculado con otros efectos, tanto por su uso directo por parte de agricultores/as y operarios/as como por la exposición indirecta de la población: reproductivos (mayor frecuencia de abortos y defectos de nacimiento), neurológicos (mayor frecuencia de Parkinson), hormonales (alteraciones endocrinas), entre otros.