¿Porque la falta de liderazgo ha sido una de las principales causas del subdesarrollo en el África?
¿Crees que los jóvenes africanos serán los futuros líderes que lleven al desarrollo a los países africanos?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1) Según Naciones Unidas, un joven es una persona entre 15 y 24 años de edad. En la actualidad, de los 1.200 millones de personas que componen la población africana, aproximadamente el 77% tiene menos de 35 años. A diferencia del resto del mundo, que se enfrenta al envejecimiento de su población, África tiene más de 200 millones de jóvenes, que son cada vez más numerosos, y se prevé que sean el doble en 2045.
Esta tasa de crecimiento demográfico sin precedentes en la historia moderna de la humanidad presenta retos y oportunidades por igual. Por eso, uno de los principales desafíos que tendrá que afrontar África en el siglo XXI será el de convertir la explosión juvenil en crecimiento y prosperidad que incluyan a todos. Una mala gestión del crecimiento demográfico tendrá graves consecuencias para África, Europa y el mundo en general. Para evitarlo, los países africanos necesitarán estrategias completamente distintas en materia de liderazgo, instituciones y políticas.
2) Según Naciones Unidas, un joven es una persona entre 15 y 24 años de edad. En la actualidad, de los 1.200 millones de personas que componen la población africana, aproximadamente el 77% tiene menos de 35 años. A diferencia del resto del mundo, que se enfrenta al envejecimiento de su población, África tiene más de 200 millones de jóvenes, que son cada vez más numerosos, y se prevé que sean el doble en 2045.
Esta tasa de crecimiento demográfico sin precedentes en la historia moderna de la humanidad presenta retos y oportunidades por igual. Por eso, uno de los principales desafíos que tendrá que afrontar África en el siglo XXI será el de convertir la explosión juvenil en crecimiento y prosperidad que incluyan a todos. Una mala gestión del crecimiento demográfico tendrá graves consecuencias para África, Europa y el mundo en general. Para evitarlo, los países africanos necesitarán estrategias completamente distintas en materia de liderazgo, instituciones y políticas.