por que a medida que aumenta la escala de la vida del organismo más sencillo al más complejo crece el conocimiento el conocimiento general del número de especies
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Definición de sucesión
Una sucesión ecológica puede definirse en función de tres parámetros (Odum, 1963):
Es un proceso ordenado de crecimiento de una comunidad, lo bastante direccional como para poder considerarlo predecible.
Es el resultado de la modificación del entorno físico por parte de la comunidad. Esto significa que la comunidad controla el proceso de sucesión, aunque el entorno físico determine los patrones, el ritmo de los cambios y a menudo establezca los límites del crecimiento.
La sucesión culmina en un ecosistema estable, en el cual se mantiene un máximo de biomasa (o contenido de mucha información) y de relaciones de simbiosis entre los organismos por unidad de flujo energético disponible.
En pocas palabras, la estrategia de sucesión como proceso a corto plazo es básicamente la misma estrategia de desarrollo evolutivo a largo plazo que se da en la biosfera —es decir, aumento de control sobre el entorno físico, o bien homeostasis [2] con el mismo en el sentido de alcanzar un máximo de protección frente a posibles perturbaciones. Como se ilustra más abajo, la estrategia de máxima protección (entendida como el mantenimiento del mayor número posible de estructuras vivas complejas) a menudo entra en conflicto con el objetivo humano de máxima producción. Llegar a reconocer la base ecológica de este conflicto es, posiblemente, el primer paso para el establecimiento de políticas sensatas de usos del suelo.
Explicación: Los principios de la sucesión ecológica pueden ser de aplicación en la relación entre el ser humano y la naturaleza. El marco de la teoría sucesional debe revisarse como base que permita resolver la actual crisis ambiental. La mayoría de las ideas referentes al desarrollo de sistemas ecológicos se basan, bien en datos descriptivos de los cambios producidos en comunidades bióticas obtenidos mediante la observación durante largos periodos de tiempo, o bien en suposiciones muy teóricas; muy pocas de las hipótesis generalmente aceptadas se han comprobado experimentalmente. Gran parte de la confusión, vaguedad y ausencia de trabajos experimentales en este área tienen su causa en la tendencia por parte de los ecólogos a considerar la sucesión como una idea simple y unidimensional, cuando en realidad se trata de un conjunto de procesos que interactúan entre sí y en el cual algunos llegan a contrarrestar las acciones de otros.
Según el planteamiento aquí presentado, la sucesión ecológica conlleva el desarrollo de los ecosistemas; se trata de un concepto que tiene muchos paralelismos con la biología del crecimiento de los organismos y también con el desarrollo de las sociedades humanas. Se considera un ecosistema, o sistema ecológico, a una unidad de organización biológica constituida por todos los organismos existentes en un área dada (es decir, una comunidad) que interactúan con el entorno físico de modo que el flujo de energía producido conduce a determinadas cadenas tróficas y ciclos de materiales característicos del sistema. El propósito de este artículo consiste en resumir en forma de cuadro, los componentes y etapas de desarrollo de un ecosistema, destacando aquellos aspectos de la sucesión ecológica que puedan aceptarse desde la base del conocimiento actual, aquellos que necesitan ser estudiados más a fondo y aquellos que tienen una especial importancia sobre la ecología humana.