desarrollar la lucha entre almagro hermoso y el gobernador vaca de Castro .
Respuestas a la pregunta
Respuesta: La batalla de Chupas fue un combate que enfrentó a los realistas (leales a la corona española) dirigidos por el Visitador Cristóbal Vaca de Castro, contra los almagristas (rebeldes) comandados por Diego de Almagro el Mozo. Se desarrolló en la llanura de Chupas, cerca de Huamanga (actual región de Ayacucho), el día 16 de septiembre de 1542. El resultado de la batalla fue la derrota completa de los almagristas y la captura posterior de Almagro el Mozo, quien fue juzgado y condenado a muerte. Fue la batalla más sangrienta de la Guerra civil entre los conquistadores del Perú.
Tras el asesinato de Francisco Pizarro a manos de los almagristas (26 de junio de 1541), estos convirtieron a Diego de Almagro el Mozo en Gobernador del Perú.
A fines de 1541 se anunció la inminente llegada al Perú del Juez Visitador Cristóbal Vaca de Castro, enviado por la corona española para pacificar el Perú y quien se hallaba ya en Quito. Se sublevaron entonces Pedro Álvarez Holguín en el Cuzco y Alonso de Alvarado en Chachapoyas, sumándose ambos al bando del Rey.
Ante tal panorama, Almagro el Mozo y los suyos abandonaron Lima y se adentraron a la sierra para contener a Pedro Álvarez Holguín y organizar la resistencia contra Vaca de Castro. Con ellos iba Juan de Rada como Capitán General, pero éste se enfermó en Huarochirí, siendo entonces reemplazado por García de Alvarado y Cristóbal de Sotelo.
Los almagristas continuaron hacia el sur y llegaron a Jauja. Desde allí Almagro el Mozo envió a García de Alvarado en búsqueda de Pedro Álvarez Holguín, para impedir que bajara a la costa y se uniera con Alonso de Alvarado. Pero García de Alvarado fracasó en la misión, al escabullírsele dicho jefe realista. Almagro lo destituyó entonces, proclamándose él mismo como único Capitán General, y nombrando a la vez como Maese de Campo a Cristóbal de Sotelo. Esto dolió mucho a García de Alvarado quien esperó la oportunidad de vengarse. Por entonces falleció Juan de Rada, lo que significó un rudo golpe para el bando almagrista, pues hasta entonces había sido el verdadero conductor y cerebro del grupo.
Los almagristas pasaron luego a Huamanga, donde fabricaron cañones, labor que dirigió el artillero Pedro de Candía. Hicieron también contactos con Manco Inca, para buscar su alianza. Reemprendieron luego la marcha hacia el sur y arribaron finalmente al Cuzco, donde Almagro fue recibido apoteósicamente, confirmándosele como Gobernador del Perú.
Mientras tanto, Vaca de Castro llegaba al Perú pasando por Piura y Trujillo; en Huaraz se le unieron Alonso de Alvarado y Pedro Álvarez Holguín con sus respectivas fuerzas. Luego ingresó a la ciudad de Lima, el 7 de agosto de 1542, donde sin embargo, estuvo poco tiempo. Se trasladó a Jauja, donde se habían reunido todas las fuerzas leales al Rey, que sumaban unos 500 hombres. Entre ellos se contaban como los más fervorosos militantes los pizarristas, que deseaban vengar al marqués Francisco Pizarro. Ante todos ellos Vaca de Castro se proclamó Gobernador del Perú y Capitán General del Ejército Realista.
De otro lado, en el Cuzco, Almagro el Mozo tuvo que enfrentar las disensiones entre sus mismos oficiales. García de Alvarado mató a Cristóbal de Sotelo en venganza por viejas rencillas; a su vez, García de Alvarado, quien planeaba asesinar a Almagro el Mozo y pasarse al bando realista con todo su ejército, fue asesinado por el mismo Almagro, adelantándosele de esa manera.