cuento corto con las siguientes palabras
bruja
cueva
sol
caballo
asustada
piedras
puerta
escoba
tristes
Respuestas a la pregunta
Los habitantes de un aislado pueblo, perdido en Inglaterra, observaban curiosamente la llegada de una nueva vecina. Se llamaba Malaga y era una linda mujer que siempre se vestía de un amarillo tan espectacular, e irritante, como el mismísimo sol en el cielo. Realmente no salía mucho de su casa, sino que prefería encerrarse en ella y trabajar en sus "experimentos" hasta altas horas de la noche. Pero cuando salía de su casa por las mañanas, era amable con todo mundo, e incluso regalaba pasteles a sus vecinos. Así que había logrado ganarse el aprecio de los pueblerinos que no llegaban a la cifra de 40 personas.
Un buen día, los niños del pueblo, que tan solo eran diez, fueron atraídos hacia su casa por los estruendosos sonidos que de ella provenían. Se acercaron curiosos a la ventana y allí se apretujaron, pensando que algo había pasado con los pasteles de la mujer. No podían ver mucho en verdad, pero una de las explosiones en casa de Malaga tiró las cortinas, a la ves que rompió la puerta en mil pedazos que se convirtieron en pequeños ratones.
Los chiquillos observaron asustados a su vecina, que tenía la misma mirada asustada de ellos, probablemente porque habían descubierto su secreto. Ni bien se recuperaron del susto, corrieron por la calle gritando de emoción al ver que Malaga, también tenía cabello de colores y gatos corriendo por la casa. El griterio, obviamente, atrajo a los adultos, que inmediatamente trajeron armas y alejaron a sus niños, comenzando a atacar a la mujer.
Malaga no tuvo más opción que huir del lugar, dejando atrás su caldero y sus gatos. Los pueblerinos corrieron en busca de caballos para atrapar y quemar a la bruja, mientras los demás la perseguían a pie, y otros le arrojaban piedras desde lo lejos.
Desafortunadamente para los pueblerinos, Malaga pudo huir. Lo único que de ella sabían, era que vivía en alguna cueva en las montañas y que cada noche salía a volar en su escoba. Los niños del pueblo estuvieron tristes durante algún tiempo, ya que habían notado su error al delatar, sin querer, a su amable vecina que les regalaba pasteles. Sin embargo, cuando tres de ellos fueron secuestrados por la bruja meses después, se alegraron inmensamente cuando sus padres les aseguraron que la bruja ya no existía más, mientras presumían la escoba chamuscada como un trofeo.
Respuesta:
cuento piedra
Explicación: