¿Cuáles son los 2 elementos técnicos para hacer un buen regate?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
situaciones que se le presentan al jugador en posesión del balón, donde no existe la posibilidad de ejecutar un pase, conducir, ejecutar un cambio de orientación o tirar a la portería, todo ello propiciado por la oposición constante de uno o de varios adversarios que tienen como objetivo fundamental recuperar el balón. Ante situaciones de juego como la que se describe, el jugador ofensivo no tiene otra alternativa que ejecutar el elemento técnico-táctico regate con la finalidad de desestabilizar y desorientar al adversario o a los adversarios que salen a su encuentro.
En este sentido Sanchis planteó: “…cuando la situación no permite realizar el pase, el regate se hace necesario siempre que sea posible para crear una situación ventajosa.” Pero también es importante precisar que en algunas ocasiones, ante una situación de este tipo el jugador con balón no puede solucionar el problema que se le presenta por no poseer los conocimientos técnico- tácticos sobre el regate. Por este motivo; y sin la intención de minimizar la importancia del pase como el elemento más importante en el juego de fútbol es necesario que los entrenadores que trabajan en la base, se den a la tarea de formar jugadores que sepan aplicar el regate de forma correcta y siempre en función del equipo debido a las ventajas que brinda esta acción para el juego ofensivo, entre las que se destaca el factor sorpresa aspecto muy importante y buscado en el fútbol actual.
Respuesta:
situaciones que se le presentan al jugador en posesión del balón, donde no existe la posibilidad de ejecutar un pase, conducir, ejecutar un cambio de orientación o tirar a la portería, todo ello propiciado por la oposición constante de uno o de varios adversarios que tienen como objetivo fundamental recuperar el balón. Ante situaciones de juego como la que se describe, el jugador ofensivo no tiene otra alternativa que ejecutar el elemento técnico-táctico regate con la finalidad de desestabilizar y desorientar al adversario o a los adversarios que salen a su encuentro.