Cuáles son las enfermedades más comunes en la actividad deportiva
y en el ambiente escolar.
¿Qué medidas de prevención se pueden tener?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Todos conocemos la multitud y variedad de efectos beneficiosos que posee la Actividad Física (AF) y el Deporte, sin embargo, esta práctica físico-deportiva puede resultar peligrosa y nociva cuando no se realiza y controla de forma adecuada.
Muchos accidentes se producen por ignorar o desconocer sus causas y sus consecuencias. La prevención es un aspecto clave que empieza por ser conscientes del cuidado de nuestra propia salud y del entorno que nos rodea, y el respeto por la vida.
Por prevención entendemos todas aquellas medidas que se deben tomar para evitar un riesgo o lesión; y por otro lado, para mejorar la calidad de la práctica física. Así, en la prevención de accidentes o lesiones deportivas en el ámbito escolar debemos de tener en cuenta los siguientes criterios o factores de riesgo:
Higiene Personal.
Hábitos Nutricionales
Hábitos de trabajo relacionados con las sesiones.
Higiene postural del ejercicio.
Utilización correcta de los espacios-instalaciones y materiales.
Aún teniendo en cuenta los criterio citados anteriormente, el primer aspecto preventivo a considerar en nuestro alumnado sería la realización de una Revisión Médica; ya que el grupo de población formado por niños/as y adolescentes se somete a esfuerzos físicos regulares que demandan la necesidad de una determinada y/o vigilancia de su estado de salud, por lo que requieren la realización de reconocimientos médico-deportivos previos a la participación físico-deportiva, llevados a cabo periódicamente.
Según Ferrer (1996), una revisión médica tipo debe de reunir los siguientes aspectos:
Historia Clínica; antecedentes familiares, personales y deportivos (enfermedades crónicas, años de práctica y tipo de práctica deportiva).
Antropometría, con determinación del peso y la talla.
Exploración del aparato locomotor, valorándose las posibles alteraciones funcionales, desniveles, asimetrías, deformaciones, etc., en raquis, pelvis, miembros inferiores, rodillas y pies. También incluiremos una exploración músculo-tendinosa, donde se valorarán los posibles acortamientos, los tonos excesivos o deficientes, debilidades estructurales, etc.
Exploración pulmonar y cardiovascular, que determinen cualquier tipo de disfunción que limite o impida la práctica física; con medición de la tensión arterial y algún test de adaptación al esfuerzo, como el de Ruffier-Dickson, que ayuden a conocer el rendimiento del sujeto.
Explicación:
tuve un problema con web no pude ayudarte