Conclusion general de la crisis de Sudán, Zimbabwe y Venezuela
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1 Las guerras en Sudán son las de más larga duración en toda África. La primera tuvo lugar entre 1963 y 1972, cuando los rebeldes de Sudán del Sur se alzaron contra el gobierno de Sudán dominado por las élites arabizadas. Aunque Sudán dio cierta autonomía al sur en 1972, no fue suficiente. El conflicto se reanudó en 1983 con la creación del Sudan People´s Liberation Movement/Army (SPLM/A). En 2005, después de una cruel guerra, el gobierno de Jartum, capital de Sudán, firmó la paz por la que concedió el derecho a la autodeterminación de los territorios del sur, con excepción de los Estados Nilo Azul y Kordofan del Sur. Unas guerras que han costado 2 millones de muertos entre combates, hambre y enfermedades.
2 La cuestión principal en Zimbabue es la reforma agraria que aún está pendiente y que el país arrastra debido a su pasado como colonia del Imperio Británico. Durante aquel periodo histórico, los blancos se apropiaron de las mejores tierras que expropiaron a los africanos, y estos últimos se vieron obligados a trabajar las tierras menos fértiles y productivas.
De esta forma, actualmente unos 4500 europeos (0,03% de la población) controlan el 70% de las mejores tierras del país, unos 11 millones de hectáreas. Estas tierras están sometidas a un modelo de explotación orientado a la exportación (principalmente tabaco, flores y cereal) basado en un crecimiento que únicamente beneficia a los propietarios y que excluye a la gran masa rural de la población. Además, tenemos que destacar la mano de obra aún más barata que llega de los países vecinos como Mozambiqu
3 la crisis económica y política del país y como se va devaluando y creciendo con el tiempo de nuestra historia.
En Venezuela desde ya hace mucho tiempo han estado ocurriendo ciertas situaciones a las que todos los venezolanos nos hemos visto influenciado ya que tenemos que ver con ello por ser nuestro país. También vamos a poder observar ciertas deudas que tiene Venezuela y la macrodevaluaciòn del paìs