8. ¿Cómo podría ayudar la familia a un adolecente para tener una familia sana?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
PERDON POR ESCRIBIR TANTO ESPERO QUE LO ENTIENDAS
Explicación:
La familia es el primer grupo social del cual formamos parte todos y todas y es ella quien nos convierte en seres sociales al transmitir todo el cúmulo de conocimientos, normas, valores, usos, costumbres que constituyen la sociedad.
Es también el núcleo de acogida y de amor para cada uno de sus miembros, permitiéndoles alcanzar un desarrollo completo y constituyéndose así en un verdadero refugio del mundo exterior.
Independiente de cuál sea el tipo de familia, de ella se espera todo aquello que no se encuentra en las relaciones del mundo exterior: intimidad, afecto, aceptación del otro, respeto por su individualidad.
Según esto la familia cumple distintas funciones, algunas de las cuales se enumeran a continuación.
Las principales funciones que debe cumplir la familia
unción reproductora biológica: Tendiente a la conservación y mantención de la especie.
Función protectora de seguridad material: Debe satisfacer las necesidades básicas de mantenimiento de sus miembros, debe proporcionar una alimentación adecuada, una habitación sana, y cuidados de acuerdo a sus requerimientos dependiendo de la etapa de crecimiento y desarrollo en que se encuentran cada uno de sus miembros.
Función Afectiva Debe satisfacer las necesidades de afecto. Cada miembro necesita recibir y dar amor. Las familias que desarrollan el afecto verbal y físico (piel a piel), forman individuos con alta autoestima, creativos y seguros de sí mismos. La relación madre hijo es la primera que experimenta cada ser humano y de su calidad dependerá en gran parte como se relaciona con otras personas a lo largo de su vida. La relación con su madre y con el resto de la familia determinará la evolución normal de su afectividad, vale decir, que llegue a ser un adulto normal y equilibrado. La interrupción del contacto materno con el niño en esta primera etapa de su vida puede originar graves trastornos en su salud, dando origen a lo que se llama deprivación afectiva. De ahí lo fundamental que resulta el reemplazo de la imagen materna cuando la madre biológica está impedida de cumplir su rol ya sea por muerte, abandono o incapacidad; el niño o niña requiere familiarizarse con una persona que ocupe
lugar de su madre, que pueda cuidarlo, darle amor y protección.
La deprivación afectiva tiene una influencia decisiva en el desarrollo personal de todo niño o niña, no puede sentir amor por sí mismo/a si sus padres no le han demostrado este sentimiento, asimismo no puede trascender a otros, porque no ha aprendido esta capacidad. (1,2,3)
Al otro extremo, la sobreprotección le impide aprender a enfrentar la realidad lo que puede llevarlos a ser personas muy inseguras. También puede transformarlos en seres muy egoístas y exigentes.
Desarrollo de una identidad personal: Lo vital para todo ser humano es sentirse parte de una familia, la que debe darle la oportunidad de su propio desarrollo como individuo.
Formación de roles sexuales: Es en la familia donde el niño debe aprender a comportarse en forma masculina y la niña en forma femenina de acuerdo a los roles que se le asignan. este aprendizaje lo adquiere a través de los juegos, de modelos, (fundamentalmente los padres) y escuchando los mensajes que transmiten los miembros de la familia.
Los padres son modelos para sus hijos, no sólo por lo que saben intelectualmente, sino por lo que son en cuanto a su propio desarrollo personal y afectivo. Es través de esto que ellos transmiten un sentido de dignidad, de independencia y de una autoestima realista. La madre transmitirá la seguridad y valoración que posee en sí misma como mujer y lo transmitirá a su hija como modelo deseado.
Tradicionalmente los roles de padre y madre han sido marcadamente diferenciados por las funciones que cumplen entre otros, el manejo de la casa, el cuidado de los hijos, el control de los hijos y el sustento económico se asignan de acuerdo al sexo.
El rol tradicional de la mujer es el de esposa y madre, su ocupación e intereses son domésticos, referidas al hogar y al cuidado del resto de los miembros de la familia, aún cuando gran número de mujeres se han incorporado al campo laboral, su valor dominante sigue siendo su función hogareña, y contribuir a estrechar los lazos familiares y a dar equilibrio emocional y afectivo como clima básico en el hogar. La recompensa por esta tarea es casi enteramente emocional, ocupando ella por lo tanto, una posición económicamente subordinada dentro de la familia sobre todo en sectores más conservadores.
Tradicionalmente entonces el rol materno sociológicamente se representa y relaciona con el concepto del hogar, dar unión al grupo familiar, darle afectividad a sus miembros y otorgar seguridad y apoyo.