1. ¿Qué función tiene el sistema nervioso?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Para que la información llegue a nuestro Sistema Nervioso, necesitamos los receptores. Ojos, oídos, piel… Éstos son los que recogen lo que percibimos y envían los datos en forma de impulsos eléctricos a través de nuestro organismo, hacia nuestro Sistema Nervioso.
Sin embargo, no solamente reaccionamos ante lo percibido del exterior, si no que nuestro corazón late, nuestro hígado secreta bilis, nuestro estómago hace la digestión… y de todos estos procesos internos también se encarga nuestro Sistema Nervioso.
¿De qué más se encarga?
Controla nuestro hambre y nuestra sed, el ciclo sueño – vigilia y regula la temperatura corporal (mediante el hipotálamo).
Las emociones (mediante el sistema límbico) y pensamientos.
Aprendizaje y memoria (mediante el hipocampo).
Movimiento, equilibrio y coordinación (mediante el cerebelo).
Interpretar la información recibida a través de todos los sentidos.
Funcionamiento de nuestros órganos internos: Pulso, digestión…
Reacciones físicas emocionales.
y muchos procesos más.
Podemos observar ciertas características que son propias del SNC:
Sus componentes principales, están muy protegidos del medio externo. Siendo así que el Encéfalo, por ejemplo, se encuentra recubierto por tres membranas, a las que denominamos Meninges y éstas, a su vez, por la estructura ósea que denominamos cráneo. Por otra parte, la Médula Espinal, también se encuentra protegida por una estructura ósea, la Espina dorsal. Si nos fijamos, en nuestro cuerpo, todos los órganos imprescindibles para la vida, están protegidos del exterior. “Yo me lo imagino como un castillo, donde el Encéfalo es el Rey, sentado en su trono y protegido por las grandes paredes de su fortaleza”.
Las células que funcionan en el SNC se organizan de tal forma que crean dos estructuras diferenciadas, la sustancia blanca y la sustancia gris.
Para poder realizar su función principal (recibir información y enviar señales y órdenes), se necesita un medio. Tanto el encéfalo como la médula poseen unas cavidades llenas del líquido cefalorraquídeo. Este, además de ser el medio de transmisión de sustancias, se encarga de eliminar residuos y mantener una homeostasis.