1.- Como se medía el bienestar de una población hace unas décadas?
2.- En donde descansa la verdadera riqueza de las naciones?
3.- Como podrá acumular riqueza una nación?
4.- Que reflejan el nivel de vida y el nivel educativo de la población?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1. no tan bien
2. debajo de la tierra
3. haorrando
4. buena
Explicación:
Estudio preliminar
Aunque hubo pensamiento económico desde la más remota antigüedad, la
economía no se desarrolla como disciplina científica hasta el siglo XVIII. El libro
que tiene el lector entre sus manos, y cuya versión original fue publicada en dos
volúmenes en Londres a comienzos de marzo de 1776, es una suerte de partida de
nacimiento de la ciencia económica. No sólo fue la referencia fundamental de la
escuela clásica de economía, que agrupa a figuras como Malthus, Say, Ricardo,
John Stuart Mill e incluso Karl Marx. Desde entonces hasta hoy los economistas lo
han leído y existe un amplio consenso en que el primero y más ilustre de sus
colegas fue el escocés Adam Smith, el autor de Una investigación sobre la naturaleza y
las causas de la riqueza de las naciones —tal el título completo de la obra.
Esto solo ya bastaría para que el libro mereciese un lugar en la biblioteca de
cualquier persona medianamente culta. Pero hay algo más. Adam Smith no es
solamente el padre de una ciencia sino también de una doctrina: el liberalismo
económico. Es en este segundo aspecto donde se cimenta la fama de Smith más allá
del círculo de los economistas. Probablemente muy pocos políticos han leído La
riqueza de las naciones, pero muchos hablan del «liberalismo smithiano» y todos
saben que fue Adam Smith el autor de la más célebre metáfora económica, según la
cual el mercado libre actúa como una «mano invisible» que maximiza el bienestar
general —el lector curioso podrá encontrar la cita apenas comenzado el capítulo II
del Libro Cuarto; la expresión aparece solamente una vez en esta obra y Smith la
había empleado antes en sólo dos oportunidades, una en la Teoría de los sentimientos
morales y otra en un temprano ensayo sobre la historia de la astronomía.
Adam Smith nació en Kirkcaldy, un pueblo de la costa este de Escocia, cerca
de Edimburgo, en enero de 1723. Nunca conoció a su padre, llamado también
Adam Smith, juez e inspector de aduanas, que murió pocas semanas antes de que
naciera su hijo. Entre esta traumática circunstancia y la débil salud del niño, se
anudó una estrechísima relación entre Adam Smith y su madre: vivió siempre con
ella, nunca se casó y de hecho la sobrevivió apenas seis años.
Smith ha sido llamado el primer economista académico. En efecto, con
anterioridad quienes escribían sobre economía fueron con frecuencia hombres de
negocios o profesionales o intelectuales que sólo marginalmente abordaban
cuestiones económicas. Incluso en el siglo XIX habría grandes economistas que ni
estudiaron en la universidad ni fueron después profesores, como