xq la revolución de mayo no es comparable a la revolución francesa?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Hay acontecimientos en la historia que señalan puntos de inflexión en el desarrollo de la
humanidad, puntos nodales a partir de los cuales es preciso empezar a mirar las situaciones
desde otra óptica, parándose en el devenir de una manera nueva. Uno de esos hechos, de
los que modificaron sustancialmente el posicionamiento de los hombres fue, ¿quién puede
dudarlo?, la Revolución Francesa.
Y fue la Revolución Francesa, con sus marchas y contramarchas, con sus zigzagueos,
con sus cúspides y bajezas, la que nos dio la entrada a un mundo definitivamente moderno, a
un mundo que dejaba tras de sí toda la gama de lastres feudales, de una sociedad altamente
estratificada y encerrada en un universo limitado, para empezar a encaminarse hacia las
nuevas concepciones que venían pujando desde tiempos atrás por objetivarse en formas
concretas.
Sin embargo, por importante que fuera, la Revolución Francesa no es sino la culminación de un vasto y doloroso proceso iniciado varios siglos antes, que recién cristalizó más
o menos efectivamente hacia los finales del siglo XVIII. En ese tremendo camino recorrido por la humanidad no podemos dejar de citar el descubrimiento de América; el amanecer del capitalismo gracias al chorro interminable de metales preciosos que afluían a Europa desde el Nuevo Mundo como símbolo de la expoliación humana y ecológica; la
Reforma luterana; el Renacimiento italiano; las teorías copérnicas, cartesianas, de Kepler
y los suplicios de Galileo y Giordano Bruno; las creaciones de Leonardo, Miguel Angel,
Rubens, Velásquez, Rembrandt; el Siglo de Oro español; el pensamiento de Spinoza; la
irreverencia de Rabelais; la profundidad de Shakespeare; el trato negrero (sobre el que
hay estudios que certifican que generó tanta acumulación de capital sólo comparable a la
proveniente del oro y plata americanos); la “gloriosa” revolución inglesa de 1688 que impone el Parlamento al Rey, y su prima hermana de Holanda, con similares características;
los trabajos mecánicos, inventos, descubrimientos, artificios de Watt, Pascal, Kay, Arkwright; las magistrales tesis de Adam Smith y David Ricardo; los inicios sorprendentes de
la Revolución Industrial con la aplicación y el uso masivo del carbón, del hierro y la fuerza del vapor de agua en maquinarias novedosísimas; la aparición de una nueva clase social, totalmente definida por sus nuevos caracteres: la clase obrera; las ideas de Locke y
Hobbes sobre el Estado; el desarrollo del pensamiento de los iluministas franceses
(Helvetius, Diderot, Montesquieu, Rosseau, D´Alambert, Voltaire) con sus tesis sobre el
Contrato Social, el pacto, la división de poderes, del ciudadano.
Explicación: