uso sostenible de los paisajes volcánicos.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El vulcanismo y los volcanes son, sin duda alguna, uno de los fenómenos de la naturaleza más sugerentes y atrayentes, aunque nos genere un lógico temor. Aunque a escala humana a demás de fascinantes causan inquietud, cuando no pavor, ya os explicamos en otro post que también han sido una bendición para la evolución de las culturas neolíticas (“hombres, volcanes y terremotos ¿porqué los humanos se asientan en áreas tectónicamente activas?“). Con vistas a entender el vulcanismo resulta imprescindible comprender la tectónica de placas. En realidad, y aunque el origen subyacente es común, existe una gran variedad de paisajes, modelados y litologías distintas, conforme al tipo de vulcanismo al que un documento se refiera. Más aun, incluso para un mismo tipo de sistema “eruptivo”, pequeños matices pueden dar lugar a resultados muy dispares como os narramos en nuestro post: “tipos de islas: clasificación de sistemas insulares”. Ahora bien, tampoco se debe negar que otros patrones si parecen ser constantes (ver post: “ecología y suelos en sistemas insulares: área y relieve” y “biogeografía y edafogeografía de islas: el Efecto de las islas pequeñas”. En la presente entrega, por tanto, realizaremos una introducción que, por “pura necesidad” debe ser considerada no exhaustiva. Os recordamos que nos encontramos en nuestro curso básico sobre los suelos del mundo y su clasificación (WRB, 1998) (ver abajo referencias y post editados hasta noviembre de 2011). Seguimos pues con la traducción al español castellano realizada por Javier Manríquez Cosío de la monografía Lecture notes on the major soils of the world que contiene un capítulo que versa sobre este tema, con anterioridad a describir los Andosoles.