una leyenda bien corta plis u-u del ecuador
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Cantuña y su pacto con el diablo
Cantuña era un respetado indígena en los tiempos coloniales al que le fue encomendada la construcción del atrio de la Iglesia de San Francisco en Quito.
La paga por dicha labor era muy buena, pero la condición era que debía realizarse en el menor tiempo posible. Cantuña entonces decidió vender su alma al diablo con la condición que todas las piedras del atrio estuvieran allí puestas antes de que salieran los primeros rayos del sol.
Éste grabó en una piedra que cualquier persona que la tocara reconocería únicamente a Dios.Tres pequeños demonios que trabajaban esa noche no pudieron tocar la piedra y dejaron incompleta la construcción.
Cuando el diablo llegó para llevarse el alma de Cantuña, éste reclamó que la obra no había sido completada y que por tanto no se podía cumplir el trato, ganando su alma de vuelta.
Respuesta:
Cantuña y el pacto con el diablo
Se dice que en tiempos de la Colonia, un indio llamado Cantuña se comprometió a construir el atrio de la iglesia de San Francisco. Una noche, antes del plazo estipulado, Cantuña desesperado pactó con el diablo para que culminase la obra antes del amanecer. Como pago le daría su alma. Miles de diablillos trabajaron sin descanso, pero no alcanzaron a colocar la última piedra. Así se salvó el alma de cantuña.