Una con los datos a
Agradecimiento
Agradecimento, la
Los pensamiento de Dios cerca de agradecimento
Nehemias demostró ogradecimiento al
una forma en que yo he sido agradecido
Orden
Ordenslica
Los pensamientos de Dios acerca del orden
Nehemias demostró orden ol:
Una forma en que yo he sido ordenado:
Valentía
Valentia significa
Los pensamientos de Dios acerca de la valentia
Nohemios demostró valentia at:
Respuestas a la pregunta
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Las primeras sesentainueve semanas
Daniel 9:25 (RVR60) Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; se volverá a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos.
¿Cuándo comienzan las setenta semanas?
La clave para la interpretación de este pasaje está en que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas. La fecha de inicio de las setenta semanas es crucial para la correcta interpretación de la profecía y para darle un cumplimiento que coincida con lo anunciado. El pasaje declara que el punto inicial de las setenta semanas se establece con la emisión de una orden para reconstruir a Jerusalén. Cuatro decretos han sido identificados en las Escrituras como posibles puntos de partida de las setenta semanas de Daniel:
El decreto de Ciro El Grande para reconstruir el templo, (c. 538 a.C.) tal como se indica en 2 Crónicas 36:22-23 y Esdras 1:1-4; 6:1-5.
2 Crónicas 36:22-23 (NVI) En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, el Señor dispuso el corazón del rey para que éste promulgara un decreto en todo su reino y así se cumpliera la palabra del Señor por medio del profeta Jeremías. Tanto oralmente como por escrito, el rey decretó lo siguiente: 23 Esto es lo que ordena Ciro, rey de Persia: El Señor, Dios del cielo, que me ha dado todos los reinos de la tierra, me ha encargado que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en Judá. Por tanto, cualquiera que pertenezca a Judá, que se vaya, y que el Señor su Dios lo acompañe.
El decreto de Darío, rey de Persia, confirmando el decreto de Ciro, (Esdras 6:6-12).
Esdras 6:6-8, 12b (NVI) Entonces el rey Darío dio la siguiente orden a Tatenay, gobernador de la provincia al oeste del río Éufrates, y a Setar Bosnay y a sus compañeros, los funcionarios de dicha provincia: Aléjense de Jerusalén 7 y no estorben la obra de reconstrucción del templo de Dios. Dejen que el gobernador de la provincia de Judá y los dirigentes judíos reconstruyan el templo en su antiguo sitio. 8 También he decidido que ustedes deben prestarles ayuda, sufragando los gastos de la reconstrucción del templo con los impuestos que la provincia al oeste del río Éufrates paga al tesoro real. No se tarden en pagar todos los gastos, para que no se interrumpan las obras… 12b Yo, Darío, promulgo este decreto. Publíquese y cúmplase al pie de la letra.
El decreto de Artajerjes dado por carta a Esdras, el sacerdote y escriba (Esdras 7:11-26).
Esdras 7:13-16 (NVI) He dispuesto que todos los israelitas que quieran ir contigo a Jerusalén puedan hacerlo, incluyendo a los sacerdotes y levitas. 14 El rey y sus siete consejeros te mandan a investigar la situación de Jerusalén y de Judá, conforme a la ley de tu Dios que se te ha confiado. 15 Lleva el oro y la plata que el rey y sus consejeros han ofrecido voluntariamente al Dios de Israel, que habita en Jerusalén. 16 También lleva contigo toda la plata y el oro que obtengas de la provincia de Babilonia, junto con los donativos del pueblo y de los sacerdotes para el templo de su Dios en Jerusalén.
El decreto de Artajerjes dado a Nehemías (Nehemías 1:1-7; 2:1-8).
Nehemías se entristeció cuando algunos que vinieron de Jerusalén le dijeron que el muro de la ciudad estaba derruido y sus puertas quemadas. Cuatro meses después, cuando el rey Artajerjes le preguntó a Nehemías acerca de lo sombrío de su rostro, éste lo atribuyó al estado de destrucción en que Jerusalén estaba, a pesar de que el templo ya había sido reconstruido setentaiún años antes.
Nehemías 2:2-3 (NVI) ¿Por qué estás triste? No me parece que estés enfermo, así que debe haber algo que te está causando dolor. Yo sentí mucho miedo 3 y le respondí: ¡Qué viva Su Majestad para siempre! ¿Cómo no he de estar triste, si la ciudad donde están los sepulcros de mis padres se halla en ruinas, con sus puertas consumidas por el fuego?
Cuando el rey le preguntó a Nehemías qué quería, él pidió específicamente autorización y recursos para regresar a Jerusalén y reconstruirla.
Nehemías 2:5 Si a Su Majestad le parece bien, y si este siervo suyo es digno de su favor, le ruego que me envíe a Judá para reedificar la ciudad donde están los sepulcros de mis padres.
El rey estuvo de acuerdo y la orden para la reconstrucción de Jerusalén fue dada. Según Nehemías 2:1, esto ocurrió en el mes de nisán del año veinte del reinado de Artajerjes.
Un análisis minucioso de los pasajes bíblicos relacionados a los decretos de reconstrucción en Jerusalén demuestra que solamente el último, dado a Nehemías, incluye específicamente obras de reconstrucción de la ciudad. Los tres primeros solo mencionan trabajos de restauración del templo, no de la ciudad.
Explicación:
espero que te sirva dame coronita porfavor