Química, pregunta formulada por dashtefa13, hace 11 meses

un texto o historia en el que se demuestre la empatia?​

Respuestas a la pregunta

Contestado por labbcitajsjs
3

Respuesta:

Santi era un niño al que le encantaba ir al cole y hacer cualquier cosa. Cualquier

cosa menos pintar. No le importaba que se tratase de lápices de colores, de ceras,

de acuarelas o de pinturas al óleo. Se podía muy nervioso cada vez que veía un

pincel entre sus dedos y se bloqueaba.

Sus padres trataban de que al menos lo intentase pero no había manera. Un día en

un rastrillo Santi encontró una caja de acuarelas a la que no pudo resistirse. No

sabía cómo explicarlo, pero sintió un deseo irrefrenable de abrirla, oler y tocar las

pinturas. Así que se la llevó a casa y se animó a rescatar sus viejos pinceles del

fondo del cajón. Sobre una cartulina, comenzó a hacer algunos trazos sin una idea

clara de lo que quería dibujar. Iba deslizando el pincel según le marcaba su instinto.

A las dos horas, le entró hambre y fue a la cocina a merendar. De repente, el dibujo

comenzó a hablar:

- ¿Me vas a dejar así, sin forma definida? Dame alguna identidad, por favor.

Santi, incrédulo, puso el dibujo debajo del flexo de su escritorio y trató de imaginar

de qué podía tratarse. Lo primero que hizo fue dibujarle un par de ojos. Lo que pasa

es que dibujó uno más alto que el otro…..

- Con los ojos así no puedo enfocar bien…..

Santi le pidió perdón y le explicó que no dibujaba muy bien.

- ¡Bueno, no pasa nada! -le interrumpió el dibujo-. Seguro que si lo intentas de

nuevo te sale mucho mejor ¡venga, coge la goma de borrar!

PEl dibujo mágicooco a poco el propio dibujo fue dándole instrucciones y diciendo a Santi cómo

pintar. Se pasó el fin de semana dibujando y borrando… mezclando colores y

probando nuevos trazos y figuras. El lunes, al volver al colegio, Santi esperó con

ansia la hora de plástica para poder poner en práctica todo lo que había aprendido.

Nadie le creía cuando decía que había sido el propio dibujo quien le había dicho

cómo hacerlo. Así que Santi tuvo que aceptar la realidad y convencerse a sí mismo

de que lo que había pasado es que se había autoconvencido de que, si se lo

proponía, era capaz de mejorar. Se tratase de acuarelas o de cualquier otra cosa.

Otras preguntas