Un día, un hombre se acerco a Mahoma y expresó sus tristeza y su frustración . Se sentía miserable por haber discutido con enfado con un amigo. Lamentaba sus palabras poco amables y preguntó al profeta lo que podía hacer para remediarlo.
Mahoma le aconsejo al hombre que recorriera la ciudad y colocara plumas en los escalones de muchas casas. Le dio instrucciones para que dejara allí las plumas durante la noche, que las recogiera por la mañana y que se reportara con él después.
Al día siguiente, el hombre se acercó a Mahoma con expresión de angustia.
Mahoma – se lamentó el hombre - . ¡Hice lo que me dijiste, pero cuando regresé esta mañana para recoger las plumas que dejé anoche, no encontré ninguna!
- Lo mismo sucede con tus palabras – explicó Mahoma- , pues salieron de ti e hicieron su trabajo, para no ser recordadas de nuevo.
Es posible remedir el daño causado por nuestras palabras malas o negativas, al pronunciar otras palabras mejores que las reemplacen; sin embargo, es más inteligente estar consciente de que nuestras palabras tienen en realidad mucho más poder, que lo que la mayoría de nosotros imaginamos.
Respuestas a la pregunta
Contestado por
1
Respuesta:
umm cual es tu pregunta
no entendí :(
elizabethmaldo41:
de esa histiria me pide que identifique en el texto anterior cda uno de los elementos de la comunicacion
Otras preguntas
Física,
hace 4 meses
Religión,
hace 4 meses
Inglés,
hace 8 meses
Tratamiento de datos y azar,
hace 1 año
Matemáticas,
hace 1 año