Un cuento de un autor latinoamericano corto,que lleve Inicio del cuento,Desarrollo y Desenlace
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El mono y la naranja
Érase una vez un mono que más que mono parecía una mula de lo terco que era. Resulta que una mañana, el susodicho mono se empeñó en pelar una naranja al tiempo que se rascaba la cabeza porque le picaba muchísimo. Como tenía las dos manos ocupadas en calmar el insoportable cosquilleo, cogió la naranja con la boca y la dejó caer al suelo.
Sin dejar de rascarse con la izquierda, liberó la derecha y se puso a ello con muchas ganas. Se sentó en el suelo, cogió la naranja con la mano derecha, la colocó entre sus rodillas, y continuó retirando la monda mientras seguía rasca que te rasca con la izquierda. Emperrado en hacer las dos cosas al mismo tiempo agarró la naranja con una mano y la introdujo en el río para quitarle la suciedad.
– ‘No puede ser que yo, uno de los animales más desarrollados e inteligentes del planeta, no consiga pelar una simple naranja’. Fue corriendo a por la naranja, la cogió con la mano derecha, volvió a remojarla en el río para dejarla reluciente, y con la izquierda retiró los trozos de piel con absoluta facilidad.
Explicación:
Moraleja: Si en alguna ocasión tienes que hacer dos tareas lo mejor es que pongas toda la atención en una, la termines correctamente, y luego realices la otra. De esta forma evitarás perder el tiempo de manera absurda y te asegurarás de que ambas salgan bien.