Todo sobre la coronación de carlomagno
(si no te sabes el tema no escribas)
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La noche del 25 de diciembre del año 800, Carlomagno, rey de los francos, fue coronado emperador romano por el Papa León III en la Catedral de San Pedro, convirtiéndose en uno de los soberanos más poderosos de su tiempo. Carlomagno (aprox. 747-814) había partido a Roma en noviembre de 799.
El reinado de Carlomagno pareció rememorar la grandeza del imperio de los césares romanos. Su reinado supuso un renacimiento cultural en Europa que tuvo en Aquisgrán, la capital, un foco de irradiación. La economía también vivió un momento de relativa opulencia durante el mandato de Carlomagno.
Explicación:
Su coronación se convirtió, de este modo, en el corte definitivo entre los últimos vestigios de la Antigüedad tardía y la Europa propiamente medieval. Un momento clave en la historia del viejo continente que tuvo lugar en Roma la noche de Navidad del 800 d.C..
La coronación de Carlomagno como emperador fue, ante todo, una cuestión de conveniencia entre él y el Papa León III, al que había ofrecido protección tras escapar de un intento de asesinato y refugiarse en su corte. Carlomagno, que en ese momento había ampliado desmesuradamente el reino franco por medio de las armas, para mantener su control necesitaba la autoridad moral que sólo el Papa le podía conceder. Por su parte, León III requería de un protector poderoso que le garantizara su lugar al frente de la Iglesia y su propia vida. Además, Carlomagno era el hombre que necesitaba para restaurar del liderazgo de la Cristiandad occidental frente al poder de Constantinopla.
En otoño del año 800, el rey franco acompañó a León III a Roma, asegurándole su protección frente a sus opositores en la Iglesia y restaurando su poder como Papa. Ya fuera por iniciativa del pontífice o más seguramente por un acuerdo entre ambos, durante la misa de Navidad celebrada en la antigua basílica de San Pedro, Carlomagno se arrodilló frente al altar para rezar, momento en el cual León III lo coronó como Emperador de los Romanos: un título que sancionaba su autoridad sobre los nobles de cualquier rango en los territorios bajo el dominio franco.
EL PODER DEL IMPERIO
El camino hacia un nuevo poder imperial fuerte se demostró más arduo de lo que esperaba: a su muerte en el año 814, el imperio Carolingio no tardó en disgregarse de nuevo en diversos reinos. Sin embargo, la figura de Carlomagno permanecería como referente del primer emperador europeo de la Edad Media, inspirando las ansias de poder de quienes le seguirían y convirtiéndose en una suerte de figura mítica, como lo fue en la Antigüedad el otro emperador al que se le dio el epíteto de “magno”: Alejandro III de Macedonia.