¿sólo los vegetales pueden ser transgénicos?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
No
Explicación:
Tambien animales o incluso humanos
Respuesta:
Muchos vegetales que consumimos actualmente, aunque no lo sepamos, están modificados genéticamente. Ni las matas de tomates que acaban en nuestras ensaladas, ni las espigas de maíz eran así originalmente, por poner algún ejemplo. El ser humano ha ido domesticando las plantaciones para conseguir frutos más apetitosos, bonitos o resistentes a las plagas.
Explicación:El método clásico para conseguir que las frutas, verduras y cereales sean como el ser humano desea es cruzar solo el tipo de cosechas que nos ofrecen los resultados que deseamos. De hecho, es lo mismo que se hace con los animales de cría, como los perros y los caballos.
Pero esta forma de “domar” a los vegetales es muy lenta, y se puede tardar hasta 20 años en modificar un cultivo para lograr conseguir que se adapte a nuestras necesidades. Sin embargo, esta práctica tiene un problema: mientras se pone la atención en un cualidad (el buen color, el buen sabor, la buena defensa a las plagas), el resto de las cualidades del alimento no pueden garantizarse, y es más que probable que acaben perdiéndose beneficios.Hace años, la ciencia aportó un proceso que aceleraba notablemente la modificación de los vegetales: los transgénicos. Este proceso consiste en incluir una cadena de ADN artificial en el genoma de las plantas, y en concreto se incluye aquella cualidad que se pretende potenciar. Como decíamos: se puede conseguir frutas más grandes, que maduren más lentamente, o que tenga una piel más brillante.
El problema ético de los transgénicos es que cuando se incluye un ADN artificial, este cae de forma aleatoria sobre el genoma de la planta, y eso genera una especie modificada que siempre al analizarse mostrará que existe una alteración. Es decir, los transgénicos tienen un “código de barras” que avisa de que no son especies naturales.