Sobre qué les habla Pablo a los atenienses en el aeropago
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hola espero te sirva si no te sirve perdoname
OBISPO BARRON
Pablo en el Areópago: Una clase magistral en evangelización
BISHOP ROBERT BARRON
JUNE 4, 2019
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La narración del discurso de Pablo en el Areópago, que se encuentra en el capítulo diecisiete de los Hechos de los Apóstoles, es como una clase magistral de evangelización de la cultura, y cualquiera que se dedique a esta tarea hoy en día debería leerlo con cuidado. El contexto del discurso de Pablo es su misión en Grecia, que comenzó cuando cruzó de Asia Menor al continente europeo. Como el gran historiador católico Cristopher Dawson dice, el paso de un predicador judío itinerante de un lado al otro del Egeo no despertaría el interés de ningún historiador convencional de la época, pero el hecho es que constituyó uno de los eventos más decisivos de la historia, pues señala la introducción del cristianismo en Europa y, a través de Europa, al mundo entero. Una primera lección para nosotros: un evangelista nunca descansa, pues el mandato del Señor es anunciar la Buena Nueva hasta los confines de la tierra.
Después de pasar un tiempo en la parte norte del territorio —Macedonia, Filipos, Tesalónica— Pablo retornó a Atenas. Hay que tomar en cuenta que, aunque su predicación en el norte dio algunos frutos, también suscitó una oposición feroz. Fue arrestado y hecho prisionero en Filipos y perseguido agresivamente en Tesalónica por una multitud enfurecida. Desde el comienzo, la predicación del cristianismo encontró oposición y los predicadores cristianos se pusieron en peligro. Los que se aventuran en este campo hoy en día no deberían sorprenderse de que el trabajo sea duro. Pero quisiera poner un énfasis especial en el hecho de que Pablo fue a Atenas, quizá el mayor centro cultural de la Roma antigua. Es un hecho constatado que los cristianos —de Pablo a Agustín pasando por Tomás de Aquino, John Henry Newman y Juan Pablo II— se encaminaron hacia centros de pensamiento, comunicación y arte. Si la gran misión de Jesús ha de ser honrada, la cultura debe ser evangelizada.