Sobre el émbolo pequeño de una silla, un peluquero con su pie aplica una fuerza de 15 N. Calcular la fuerza que podría levantar dicha silla, si un cliente cualquiera llega a cortarse el cabello, sabiendo que émbolo mayor tiene un radio de 5plg.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
"¿Cómo se ven actualmente los peinados de la mayoría de la gente?", le pregunté a Reno Harms, copropietario del salón Harms en el distrito de Prenzlauer Berg, en Berlín.
"Bastante chistosos. Mucha gente se ha cortado su propio cabello. Algunos incluso se han teñido ellos mismos. Ahora estamos haciendo mucho trabajo de reparación", dice riéndose.
Sus clientes regulares compraron cupones para usar una vez la peluquería abriera las tiendas y ayudar así a que no quebrara por la clausura, como lo hicieron cientos de berlineses con sus tiendas, cafeterías y restaurantes favoritos.
"La primera fase de la pandemia ha quedado atrás": Alemania da luz verde a reapertura de tiendas y a reiniciar el fútbol sin espectadores
Esa venta previa supuso un 50% de su ingreso normal, gracias a lo cual el salón Harms se mantuvo a flote.
Pero eso también significa que ahora Reno ha estado trabajando casi gratis.
Además, por las nuevas regulaciones solo puede atender a la mitad de los clientes a los que solía cortar el pelo por día, ya que es la única manera de mantener la distancia social obligatoria. Y entre uno y otro debe desinfectar todo el equipo.
Ciertamente, no hay escasez de clientes.
De hecho, en muchos salones en Berlín puede ser difícil conseguir una cita.
Es que muchos clientes llevan semas sin cortarse el pelo, incluso desde antes del confinamiento, ya que varios cancelaron sus citas por temor a infectarse en la peluquería.
Ahora, Reno tiene la impresión de que la gente sigue estando nerviosa por el tema, aunque no dejan de pedir citas.
"La vanidad definitivamente puede más que el miedo", bromea.
Explicación: