Si usted fuera el gobierno a que clase de bienes le cobraría impuestos y a que clase apoyaría más
Respuestas a la pregunta
Respuesta: Este trabajo analiza la estructura tributaria colombiana desde una perspectiva comparada.
El propósito central es evaluar la carga tributaria en Colombia con relación a un punto de
referencia internacional, que permita obtener conclusiones en términos de la competitividad
de las inversiones en el país en comparación con otras economías. Las comparaciones de
tasas nominales de los impuestos de renta e IVA son un lugar común en el debate sobre esta
materia en el país. En contraste, poco se sabe acerca de la tributación efectiva, que incluye
simultáneamente diferentes tipos de impuestos (nacionales y territoriales), así como la
amplia gama de beneficios tributarios existentes en el país. El calculo de las tasas
marginales efectivas, discriminadas por sector económico, es uno de los principales aportes
de este trabajo.
Aunque las comparaciones internacionales son de suma utilidad, no cabe duda que el
análisis de los efectos de la tributación sobre la inversión, el crecimiento y la generación de
empleo formal es indispensable para el diseño y debate del sistema tributario deseable para
la economía colombiana. Por ello, este trabajo busca aportar algunos elementos novedosos
en esta dirección, especialmente en lo relacionado con el efecto de los impuestos directos
sobre la inversión productiva, así como con el efecto de los impuestos a la nómina sobre el
grado de informalidad del mercado laboral
Explicación: Como es bien conocido, el tamaño del Estado en Colombia ha crecido considerablemente
durante los últimos quince años. El gasto público consolidado aumentó de 21.2% del PIB
en 1990 a 33.7% del PIB en 2003, mientras que los gastos totales del gobierno central se
elevaron de 11% del PIB en 1990 a 21% en 2004. Dada la necesidad de recursos fiscales
para atender el mayor gasto, el Congreso y los sucesivos gobiernos han aprobado más de
diez reformas tributarias de importancia desde 1990.
Como resultado de estas reformas, los ingresos tributarios del gobierno central aumentaron
de 9.7% del PIB en 1990 a 14.7% del PIB en 2004. Dicho incremento es atribuible en
buena parte al aumento de la tributación a la renta, cuyo recaudo pasó de 3.42% a 6.24%
del PIB en igual periodo, así como el IVA que pasó de 1.7% a 4.2% del PIB. La aparición
de nuevos impuestos, como el gravamen a los movimientos financieros –cuyos recaudos
ascendieron en 2004 a 0.87% del PIB--y el impuesto al patrimonio, que representó en ese
año ingresos por 0.18% del PIB, también han contribuido a aumentar la tributación.
En el caso del impuesto de renta, la tarifa máxima se elevó de 30% en 1990 a 38.5% en
2004 (vigente hasta 2007 cuando debe regresar a 35%). Más allá de los problemas causados