Si nos encontramos en un campamento y no tenemos cómo calentar el agua lo que podríamos hacer es prender un fuego y arrojar una botella de plástico con agua en su interior. Al cabo de un rato tendríamos agua caliente y el plástico no se derretirá ¿Cómo es posible?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El plástico puede deformarse tanto como quiera, pero mientras la botella esté llena de agua, no se podrá producir la combustión. ¿Sabes por qué?
Explicación:
la mayoría o todos los compuestos orgánicos que contienen carbono en su estructura pueden ser carbonizados. Es decir, son susceptibles a ser quemados y por tanto los consideraremos como combustibles. Un material combustible es precisamente lo que su nombre indica, un material que puede ser sujeto a una combustión. Durante una combustión sencilla suceden dos fenómenos: una es la liberación de grandes cantidades de energía y la segunda es la generación de un producto que se oxida y de dióxido (o monóxido) de carbono. Todos estos cambios implican la liberación de energía que suele ser tan alta que eleva muchísimo la temperatura de los materiales más allá de su punto de auto-ignición (más adelante describiremos este concepto con plenitud).