Se dice que las dietas japonesa y mediterránea prolongan la vida. ¿Cuál podría ser la razón de ésto?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
la Organización Mundial de la Salud para tener una dieta equilibrada. El reparto que propone es, aproximadamente, un 55-60% de hidratos de carbono de absorción lenta, un 12-15% de proteínas y un 25% de grasas, fundamentalmente insaturadas. Estos porcentajes normalmente están distribuidos en tres comidas al día.
En la cultura dietética japonesa se acostumbra a comer pequeñas cantidades de alimentos con una importante variedad de ellos, varias veces al día, pudiendo llegar a consumir hasta 30 alimentos diferentes cada día. Eso sí, siempre en pequeños bocados o raciones.
No solo la frecuencia varía. Al comparar los contenidos de la dieta nipona y la mediterránea detectamos otras diferencias interesantes. Por ejemplo, en la dieta mediterránea encontramos de manera significativa la presencia de lácteos, huevos, legumbres, café o las grasas insaturadas como las que aporta el aceite de oliva virgen extra. En cuanto a la dieta japonesa, predomina la presencia de las algas (ricas en proteínas de origen vegetal, vitaminas y fibra que beneficia el tránsito intestinal), los derivados de la soja (también muy ricos en proteína), o el té verde como sustituto del café.
En conclusión se observó mediante diferentes estudios epidemiológicos la relación de la pirámide alimenticia de una población en específico es desencadenante de dirvesas enfermedades a lo cual se llega que tanto la dieta del Mediterráneo cómo la nipona su población presenta bajas tasas de sobrepeso, obesidad y otras patologías de sus habitantes.