scribirás en qué se comprometen como ciudadanos para asumir una actitud crítica sobre las ideas
preconcebidas acerca de los roles de las mujeres y los hombres después de haber profundizado sobre este tema.
Respuestas a la pregunta
¿EN QUE SE COMPROMETEMOS LOS CIUDADANOS PARA
ASUMIR UNA ACTITUD CRITICA SOBRE LAS IDEAS?
RESPUESTA: Como ciudadanos se reflexiona sobre el papel de la actitud crítica en el que nos comprometemos, dado que la capacidad de pensar por sí mismo y decidir de acuerdo con criterios racionales son aspectos decisivos que todo ciudadano debe desarrollar, con el fin de propiciar actitudes criticas sobre las ideas. Otra razón que hace necesario que los ciudadanos nos comprometamos es pretender e incentivar la formación de personas autónomas, que participen activamente en la vida política, social y cultural, aspectos que implican el ejercicio crítico y reflexivo. Debemos tener presente algunos rasgos que identifican a la educación crítica, en tanto modelo que propende como seres humanos que piensen por sí mismos. Luego, podemos indagar acerca del fomento de prácticas desarrolladas que permiten el desarrollo de competencias lógicas y argumentativas dado que la actitud crítica implica una vida racional. Por último, se resalta el papel de la filosofía y de la ciencia, pues en ellas se promueven deliberaciones sobre problemas teóricos y prácticos.
EXPLICACIÓN: En conclusión, la necesidad de estimular la actitud critica es un elemento prioritario que los ciudadanos debe tener en cuenta, si lo que deseamos es promover ciudadanos y sociedades que enfrenten y se comprometen de forma racional los problemas actuales.
PRECONCEBIDAS ACERCA DE LOS ROLES DE LAS
MUJERES Y DE LOS HOMBRES:
RESPUESTA:
Hablamos de los roles de la mujer en la sociedad actual: madre, esposa o pareja, trabajadora, administradora y sostén emocional del hogar, pero no debemos olvidar que el primer rol de la mujer en la sociedad es justamente ser mujer, con su identidad y su femineidad, es no adoptar características masculinas.
El hombre era y es el “jefe” de la familia y lideraba su rumbo; la mujer y la familia lo seguían. Las parejas eran, en cierto sentido, como un equipo, en el que el hombre aportaba el ingreso y la seguridad y la mujer hacía las “tareas del hogar” y era el soporte de su marido.