REVOLUCIÓN INDUSTRIAL Y MOVIMIENTO
OBRERO
Desarrollo de la Revolución Industrial (siglo XIX)
La Revolución Industrial no ocurrió en Europa de la noche a la mañana. Uno de los factores que
más la impulsó fue el crecimiento de la población,
en parte porque las condiciones de higiene habían
mejorado y la población ya no moría tan joven;
también había una enorme cantidad de gente
obligada a emigrar a los centros urbanos y a
abandonar el campo al no encontrar trabajo allí.
Aparecieron entonces ciudades industriales y
nuevas fábricas y, con ello, la expansión de la
clase media y de la clase obrera (proletariado)
destinada a trabajar en las fábricas. La Revolución
Industrial inglesa se extendió desde Inglaterra
hasta Bélgica, Alemania, Francia y Estados Unidos,
países que tenían hierro y carbón. Estos se
copiaron de Inglaterra y utilizaron el
conocimiento de los expertos ingleses y su
tecnología. El desarrollo no fue parejo en todo el mundo. En Rusia, por ejemplo, fue lento
mientras que en Japón fue muy rápido. Lo que es claro, es que la Revolución Industrial cambió la
sociedad:
Cambios positivos:
Comenzaron a producirse muchos artículos a bajo precio que muchos podían comprar. Al haber
más demanda de estos productos, se contrataba más gente en las fábricas y en otras actividades
como construcción, ampliación de vías de comunicación y desarrollo urbano (parques, avenidas y
edificios). Se construyeron andenes y sistemas de alcantarillado para evitar enfermedades
contagiosas. Se edificaron rascacielos y torres de
apartamentos en los que vivía la clase media. La
clase social más rica vivía en los suburbios. La
tecnología exigió expertos como ingenieros y
químicos que aplicaran el conocimiento
científico. La ciencia, tecnología e industria
impulsaron el desarrollo de la sociedad. El
invento del acero facilitó el desarrollo y la
construcción. La química introdujo nuevos
productos (aspirina y la dinamita). Se inventó una
nueva fuente de energía: la electricidad;
Alejandro Volta inventó la pila. Se crearon
motores eléctricos y el dinamo, un aparato que genera energía eléctrica (hoy en día, los carros
tienen dinamo en el motor para mantener cargada la batería).
Tomás Edison hizo el primer bombillo eléctrico: ahora se podía trabajar de noche. Los ingenieros
diseñaron partes intercambiables para facilitar la reparación de una máquina. Luego vendría la
línea de ensamblaje en la fábrica. La comunicación también mejoró con el telégrafo, el teléfono,
las revistas y la locomotora. Se inventó el caucho, las cámaras, las imprentas y los textiles. La venta
de confecciones (ropa) surgió y el mercado de la moda se disparó. Mejoró el estándar de vida de la
población en general. Había oferta (se producía mucho) y demanda (se compraba mucho). Con la
economía basada en la producción industrial, se crearon nuevas clases sociales. Una fue la clase
media rica que buscaba el poder político en contra de las monarquías: a finales del siglo XIX, se
crearon nuevas naciones como Italia, Alemania y Rusia. A este movimiento se le llamaría
nacionalismo.
Cambios negativos:
La familia del obrero vivía en tugurios y sótanos húmedos en un solo cuarto y compartía el baño
con otras familias. Si un trabajador perdía su
trabajo, su familia sufría. Aun así, la ciudad era una
gran atracción para todos: había diversión,
turismo, deportes y estudio, base de todo
progreso. En las fábricas, las condiciones eran
deplorables. No había medidas de seguridad ni
seguridad social por enfermedad o accidentes. La
jornada de trabajo era de 14 horas; las mujeres
trabajaban por menos pago y los niños eran
explotados. El obrero se convirtió en un apéndice
más de la máquina, aparato que empezó a reemplazar al hombre. En la política, los países empezaron a competir utilizando la fuerza. Esto
conduciría a la guerra que ganarían los mejor tecnificados. Las diferencias entre países
industrializados y las regiones no industrializados crecieron: el mundo se dividió en colonias
(fuente de materia prima y mercado de productos terminados) y los países productores de dichos
artículos. Esta competencia entre los países de Europa por adquirir colonias se conocería con el
nombre de imperialismo3. El proletariado: La industrialización también produjo una clase obrera o
proletariado que se organizó para vocear sus reclamos y exigir cambios. En países donde el
gobierno escuchó al proletariado la transición fue pacífica, se hicieron reformas y se instalaron
gobiernos socialistas4. Allí donde el proletariado fue desatendido, se produjeron revoluciones
violentas que desembocaron eventualmente en el comunismo.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Este artículo trata sobre la Primera Revolución Industrial. Para otros eventos del mismo nombre, véase Revolución industrial (desambiguación).
Coalbrookdale de noche, pintura al óleo del artista inglés de origen francés Philip James de Loutherbourg (nacido en 1740 y fallecido en 1812).
Coalbrookdale (condado de Shropshire, Inglaterra) es considerado una de las cunas de la Revolución Industrial.
Una máquina de vapor de tipo Watt, construida por la compañía David Napier & Son Limited (Londres) en 1859.
La Revolución Industrial o Primera Revolución Industrial es el proceso de transformación económica, social y tecnológica que se inició en la segunda mitad del siglo XVIII en el Reino de Gran Bretaña, que se extendió unas décadas después a gran parte de Europa occidental y América Anglosajona, y que concluyó entre 1820 y 1840. Durante este periodo se vivió el mayor conjunto de transformaciones económicas, tecnológicas y sociales de la historia de la humanidad desde el Neolítico,1 que vio el paso desde una economía rural basada fundamentalmente en la agricultura y el comercio a una economía de carácter urbano, industrializada y mecanizada
Explicación: