Resumen del libro Manuel Pacho por eduardo caballero calderon porfa
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La novela Manuel Pacho, de Eduardo Caballero Calderón, una de las principales figuras de nuestra literatura colombiana, podemos enmarcarla en la categoría de "novela de la violencia".
Manuel Pacho
, su protagonista, personifica al testigo mudo e impotente ante las salvajadas que los viles gobiernos han acometido y cometen en todos los rincones de Colombia. Él, parapetado, en un árbol de mango, observa cómo su parentela y toda su riqueza se esfuma entre las llamas y el asesinato de sus parientes. Solo permanece a su lado el cuerpo muerto de su padre, para quien busca imponer los santos sacramentos de un sacerdote que se encuentra por allá en la distante lejanía de su posada. El día de la mortandad, su padre esperaba a unos comerciantes de ganado, que venían de Sogamoso; empero, surgen unos insólitos personajes que irrumpen en el hato. Los hombres, armados, devastan todo a su paso, asesinan a las señoras, a los jornaleros y a la progenitora de Manuel Pacho; su viejo acaba delicadamente herido, moribundo.
Manuel Pacho, hijo del dueño del hato de ‘La Vuelta del Cura’, un liberal
renombrado, se encarama en una mata de mango para salvar su vida de la masacre que según las gentes del vecindario la ejecutan los chulavitas godos. El miedo y la impotencia hacen que se orine en los pantalones mientras observa cómo se incendia el rancho de sus mayores y mientras ve balancear los cuerpos muertos de su parentela antes de ser arrojados al río. Como su padre seguía los preceptos de la ley cristiana debe darle sepultura a su padre con los ritos católicos, y para ello, envuelve el cadáver del viejo en un chinchorro y lo lleva sobre su espalda desde la vuelta del cura hasta el municipio de Orocué, porque allí si había iglesia y cura
Explicación:
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La novela Manuel Pacho, de Eduardo Caballero Calderón, una de las principales figuras de nuestra literatura colombiana, podemos enmarcarla en la categoría de "novela de la violencia".
Manuel Pacho
, su protagonista, personifica al testigo mudo e impotente ante las salvajadas que los viles gobiernos han acometido y cometen en todos los rincones de Colombia. Él, parapetado, en un árbol de mango, observa cómo su parentela y toda su riqueza se esfuma entre las llamas y el asesinato de sus parientes. Solo permanece a su lado el cuerpo muerto de su padre, para quien busca imponer los santos sacramentos de un sacerdote que se encuentra por allá en la distante lejanía de su posada. El día de la mortandad, su padre esperaba a unos comerciantes de ganado, que venían de Sogamoso; empero, surgen unos insólitos personajes que irrumpen en el hato. Los hombres, armados, devastan todo a su paso, asesinan a las señoras, a los jornaleros y a la progenitora de Manuel Pacho; su viejo acaba delicadamente herido, moribundo.
Manuel Pacho, hijo del dueño del hato de ‘La Vuelta del Cura’, un liberal
renombrado, se encarama en una mata de mango para salvar su vida de la masacre que según las gentes del vecindario la ejecutan los chulavitas godos. El miedo y la impotencia hacen que se orine en los pantalones mientras observa cómo se incendia el rancho de sus mayores y mientras ve balancear los cuerpos muertos de su parentela antes de ser arrojados al río. Como su padre seguía los preceptos de la ley cristiana debe darle sepultura a su padre con los ritos católicos, y para ello, envuelve el cadáver del viejo en un chinchorro y lo lleva sobre su espalda desde la vuelta del cura hasta el municipio de Orocué, porque allí si había iglesia y cura