Resumen de la vida del profeta Elías
porfas que sea un poco larga capas de ocupar una hoja
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Tisbé, siglo IX a.C.) Profeta judío. Vivió en tiempos de Ajab y de Jezabel y ejerció su ministerio tanto en el terreno religioso como moral. Durante un tiempo consiguió apartar a Israel del culto a Baal, pero el odio de Jezabel le obligó a marchar del país y a confiar a Eliseo la continuación de su obra.Hoy, la así llamada "Cuestión Eliana” sobre la sucesión hereditaria o entronque de los carmelitas de hoy con el Profeta Elías, que vive 900 años antes de Cristo, es una cuestión zanjada y, por lo tanto, así admitida: Elías es el Padre Espiritual o el Inspirador del Carmelo.
De hecho, Kings nos dice que el profeta no murió, sino que entró al cielo con vida «por fuego», «en un torbellino», llevado en un carro de fuego. ... Este pasaje se conoce como «La partida de Elías», y también se interpreta como una prefiguración de la propia Ascensión de Jesús al Cielo vivo, una vez resucitado
17 Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Características: Se destaca tanto en su vida personal como en sus actividades, estudios o trabajo
Explicación
Tisbé, siglo IX a.C.) Profeta judío. Vivió en tiempos de Ajab y de Jezabel y ejerció su ministerio tanto en el terreno religioso como moral. Durante un tiempo consiguió apartar a Israel del culto a Baal, pero el odio de Jezabel le obligó a marchar del país y a confiar a Eliseo la continuación de su obra.
Explicación:
Las palabras con que lo presenta el Eclesiástico («Surgió Elías, profeta igual que fuego; su palabra brillaba como la antorcha») reflejan a la perfección el carácter de Elías como enviado de Dios para restablecer la fe del pueblo hebreo en un momento de vacilaciones. En el siglo IX a.C., bajo el reinado de Ajab (o Acab) y por la influencia de la reina Jezabel, Israel se había entregado al culto de Baal. En ese momento, según narran diversos libros bíblicos (Eclesiástico, Macabeos, Reyes), apareció misteriosamente la figura del profeta Elías.
Elías se enfrentó con el monarca y le anunció, como castigo por su idolatría, una tremenda sequía que, en efecto, asoló el país durante tres años. Más tarde, Elías retó a cuatrocientos sacerdotes de Baal a que invocaran a su dios para que consumara el sacrificio de un novillo ofrecido en la cumbre del monte Carmelo, sede del culto idolátrico; los sacerdotes de Baal no lo consiguieron, en tanto que Elías, por intervención de Yavéh, logró el prodigio de carbonizar el altar y el animal.
Elías, cuyo nombre hebreo Eliyyahu significa «Yahvé es mi Dios», es uno de los llamados profetas anteriores que no pertenecen a la lista tradicional de profetas mayores y menores. Su misión en la historia de Israel era la de traer de nuevo a los caminos del Señor a un pueblo confundido. Expulsado del país por obra de Jezabel, la desaparición de Elías, arrebatado al cielo en un carro de fuego ante su discípulo Eliseo, a quien transfirió su misión, fue el anuncio de una vida más allá de este mundo. La festividad de San Elías se celebra el 20 de julio.