Historia, pregunta formulada por sofsnzn, hace 2 meses

relato de una bruja al ser condenada a muerte

Respuestas a la pregunta

Contestado por melizamartinez1235
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Respuesta:

Al principio, Francina Redorta negó que fuera una bruja. Pero todos en Menàrguens sabíamos que lo era. Y bien que lo confesó en cuanto la torturaron, entre alaridos de dolor, llantos, Dios míos e invocaciones a la Virgen. En la espalda tenía la marca del diablo, que afloró con agua bendita. ¿Quién podía dudar de sus tratos con el Maligno? Era vieja, viuda y pobre. Y preparaba pócimas y ungüentos. Recibió lo que se merecía.

Explicación:

espero que te sirva

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