relación entre paradigma y percepción
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
percepción
1.
Primer conocimiento de una cosa por medio de las impresiones que comunican los sentidos.
paradigma
2.
Conjunto de unidades que pueden sustituir a otra en un mismo contexto porque cumplen la misma función.
Explicación:
Todos tendemos a pensar que vemos las cosas como son, que somos objetivos. Pero no es así. Vemos el mundo, no como es, sino como somos nosotros o como se nos ha condicionado para que lo veamos.
Es interesante apreciar el modo en que las percepciones se forman y gobiernan nuestra manera de ver las cosas y comportarnos. Debemos examinar el mundo que vemos, pero también el cristal o la lente a través del cual lo vemos, pues ese cristal da forma a nuestra interpretación del mundo.
Cuando abrimos la boca para describir lo que vemos, en realidad nos describimos a nosotros mismos, a nuestras percepciones, a nuestros paradigmas. Cuando otras personas disienten de nosotros de inmediato pensamos que algo extraño les ocurre. Pero personas sinceras e inteligentes ven las cosas de modo distinto, pues cada una lo mira a través del cristal de su experiencia.
Existen muchos condicionamientos circunstanciales que afectan nuestras percepciones. Las influencias que obran en nuestras vidas (familia, escuela, iglesia, ambiente de trabajo, amigos, compañeros de estudio o trabajo y las costumbres sociales corrientes) tienen un efecto silencioso e inconsciente en nosotros y contribuyen a dar forma a nuestro marco de referencia, a nuestra percepción.
Paradigma es el modo en que “vemos” el mundo, no en términos de nuestro sentido de la vista, sino como percepción, comprensión e interpretación. Los paradigmas son la fuente de nuestras actitudes y conductas. Al margen de ellos no podemos actuar con integridad. Sencillamente no podemos conservarnos íntegros si hablamos y andamos de cierto modo mientras vemos de otro. Los podemos considerar mapas. El mapa no es el “territorio”. Un mapa es simplemente una explicación de ciertos aspectos de un territorio. Un paradigma es exactamente eso. Es una teoría, una explicación o un modelo de alguna otra cosa.
Con esos mapas mentales interpretamos todo lo que experimentamos. Normalmente no cuestionamos la exactitud de los mapas; por lo general ni siquiera tenemos conciencia de que existen, simplemente damos por sentado que el modo en que vemos las cosas corresponde a lo que realmente son o a lo que deberían ser. Estos supuestos dan origen a nuestras actitudes y a nuestra conducta. El modo en que vemos las cosas es la fuente del modo en que pensamos y del modo en que actuamos.
Cuanta más conciencia tengamos de nuestros paradigmas, mapas o supuestos básicos, y de la medida en que han influido en nuestra experiencia, en mayor o menor grado podemos asumir la responsabilidad de tales paradigmas, examinarlos, someterlos a la prueba de la realidad, escuchar a los otros y estar abiertos a sus percepciones con lo cual se logrará un cuadro más amplio y una modalidad de visión mucho más objetiva.
Casi todos los descubrimientos significativos en el campo del esfuerzo científico aparecen primero como rupturas con la tradición, con los viejos modos de pensar, con los antiguos paradigmas. El cambio de paradigma determina que pasemos de una manera de ver el mundo a otra.
Sólo podemos lograr una mejora considerable en nuestras vidas cuando trabajamos sobre la raíz, sobre los paradigmas de los que fluyen la actitud y la conducta, es decir de los principios que gobiernan nuestro carácter. Los paradigmas son inseparables del carácter. Ser es ver en la dimensión humana. Y lo que vemos está altamente interrelacionado con lo que somos. No podemos llegar muy lejos en la modificación de nuestra forma de ver sin cambiar simultáneamente nuestro ser, y viceversa.
Los paradigmas son poderosos porque crean los cristales o lentes a través de los cuales vemos el mundo. El poder de un cambio de paradigma es el poder esencial de un cambio considerable, ya se trate de un proceso instantáneo o lento y pausado.