Relación entre Apocalypto y la historia precolombina
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Explicación: La película de Mel Gibson no es un documento histórico.
Mel Gibson ha dicho que Apocalypto, su nueva película ambientada en la época del colapso del imperio maya, no debe considerarse un documento histórico. Y hay por lo menos un experto que no podría estar más de acuerdo. Aunque fue cuna de impresionantes proezas arquitectónicas y una ciencia asombrosamente avanzada, la decadencia de la civilización maya -que se desarrollara en los actuales territorios de México, Guatemala, Belice y Honduras- comenzó alrededor del año 800 d. C.
Las constancias arqueológicas apuntan a numerosos factores que pudieron precipitar esa caída, incluidas guerras intestinas, pérdida de rutas comerciales, sequías y enfermedades. Sin embargo, antes del colapso, los mayas gobernaron la región desde sedes de poder establecidas en docenas de ciudades.
Aunque Apocalypto no especifica fecha alguna, la película parece evocar este periodo, llamado Clásico (250-900 d. C.), sobre todo el final del mismo. Para averiguar cómo fue realmente el imperio maya, Stefan Lovgren acudió a Zachary Hruby, experto en la cultura maya, de la Universidad de California, Riverside.
El héroe de Apocalypto, Pata de Jaguar, vive en una idílica aldea de cazadores emplazada en las profundidades de la selva. ¿Considera típica semejante ambientación?
Durante la época Clásica, los mayas eran un pueblo agrícola. Aunque practicaban la caza, las presas salvajes representaban un porcentaje relativamente reducido de su dieta y, en general, es posible que la carne se considerase un artículo de lujo. Al parecer, en aquellos días siempre había algún propietario, cuidador y conservador de la selva y el hecho de que un grupo maya (en Apocalypto) no practicara la agricultura es virtualmente imposible.
¿Cree que los pobladores de aldeas mayas hayan vivido en chozas de palo, como lo hacen en Apocalypto?
Aunque las viviendas debieron estar construidas con materiales perecederos, los cimientos eran de piedra, y a menudo se levantaban en plazas despejadas para tal fin, pero no en la agreste selva. Los lotes de vivienda estaban planificados y contaban con espacios dedicados al cultivo de frutas, verduras y plantas medicinales, y a la crianza de algunos animales domesticados. El arte maya muestra a las mujeres ataviadas de forma conservadora con el tradicional vestido o huipil, con los senos cubiertos. Asimismo, había vasijas de cerámica por todas partes.