Castellano, pregunta formulada por TITOCARLOS12, hace 3 meses

Recuerdo la tarde en que se llevaron a Bruno. Estuvo un día entero sin aparecer, la tía estaba como loca.
Yo sabía qué le había pasado, y los demás también, pero nadie se animaba a decirlo.

Esto fue hace como treinta años, cuando vivíamos en Misiones, en la frontera de Uruguay con Argentina, al lado del río Iguazú.

A Bruno le faltaban veinte días para cumplir cinco años y siempre quería frascos para guardar bichos. Tenía una colección de insectos del monte, que atrapaba a la hora de la siesta mientras todos dormían. Todas las tardes, la tía le decía:

―¡Estoy harta de tanto bicherío, Bruno! Métete en la cama de una buena vez, porque si no, te va a llevar el Jasy-Jateré. Ya te he dicho que ese duende se lleva a los niños que como tú, en lugar de dormirse, andan por ahí agarrando cuanto bicho se encuentran.

Y así fue. Una tarde, Bruno esperó a que todos se durmieran, y luego se escapó para el monte a cazar avispas camoatí. Aquel día, el típico silbido de estas sonaba más fuerte que de costumbre. Pienso ahora que el inusual silbido de ese día era el Jasy que se valía de eso para atraer a Bruno. Llegó la noche y Bruno no volvió.

Recorrimos la zona con linternas y desesperación. Cada vez que podía, yo dejaba un montoncito de tabaco para que el Jasy se contentara mascándolo y nos devolviera a Bruno, en Misiones la gente decía que eso funcionaba para que regresara a los niños que se llevaba.

Lo encontré yo al día siguiente, estaba todo enredado en ramas y tenía hojas en el pelo que parecían pegadas con saliva. Vi huellas que venían del Norte, así que supuse que para ese lado se había ido el desgraciado duende. Todos saben que el Jasy es un rubio bonito, pero que tiene los pies al revés. Bruno estaba como atontado y solo se acordaba del brillo del bastón dorado que pertenece al Jasy-Jateré.Recuerdo la tarde en que se llevaron a Bruno. Estuvo un día entero sin aparecer, la tía estaba como loca.
Yo sabía qué le había pasado, y los demás también, pero nadie se animaba a decirlo.

Esto fue hace como treinta años, cuando vivíamos en Misiones, en la frontera de Uruguay con Argentina, al lado del río Iguazú.

A Bruno le faltaban veinte días para cumplir cinco años y siempre quería frascos para guardar bichos. Tenía una colección de insectos del monte, que atrapaba a la hora de la siesta mientras todos dormían. Todas las tardes, la tía le decía:

―¡Estoy harta de tanto bicherío, Bruno! Métete en la cama de una buena vez, porque si no, te va a llevar el Jasy-Jateré. Ya te he dicho que ese duende se lleva a los niños que como tú, en lugar de dormirse, andan por ahí agarrando cuanto bicho se encuentran.

Y así fue. Una tarde, Bruno esperó a que todos se durmieran, y luego se escapó para el monte a cazar avispas camoatí. Aquel día, el típico silbido de estas sonaba más fuerte que de costumbre. Pienso ahora que el inusual silbido de ese día era el Jasy que se valía de eso para atraer a Bruno. Llegó la noche y Bruno no volvió.

Recorrimos la zona con linternas y desesperación. Cada vez que podía, yo dejaba un montoncito de tabaco para que el Jasy se contentara mascándolo y nos devolviera a Bruno, en Misiones la gente decía que eso funcionaba para que regresara a los niños que se llevaba.

Lo encontré yo al día siguiente, estaba todo enredado en ramas y tenía hojas en el pelo que parecían pegadas con saliva. Vi huellas que venían del Norte, así que supuse que para ese lado se había ido el desgraciado duende. Todos saben que el Jasy es un rubio bonito, pero que tiene los pies al revés. Bruno estaba como atontado y solo se acordaba del brillo del bastón dorado que pertenece al Jasy-Jateré.

Respuestas a la pregunta

Contestado por rebeccapanduro078
0

Respuesta:

Interesante

Explicación:

Pero no entendí

Otras preguntas