rasgos de sustrayectora de diego velazquez (Lo nesecito ahora porfavor )
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Diego Rodríguez de Silva y Velázquez, mejor conocido como Diego Velázquez, nació en Sevilla en el año 1599. De abuelos portugueses, fue hijo de Juan Rodríguez de Silva, y de la sevillana Jerónima Velázquez.
La formación artística de Diego Velázquez transcurrió mayormente en su ciudad natal, Sevilla. Allí recibió clases de dos importantes maestros. Aparentemente, el primero fue Francisco de Herrera. Después, ingresó al taller del maestro Francisco Pacheco, quien fue una figura fundamental en su vida y posterior desempeño.
De hecho, en 1618 se casó con la hija de su maestro, Juana Pacheco, cuando aún no cumplía los 19 años de edad. Con ella tuvo dos hijas, Francisca e Ignacia, también nacidas en la ciudad de Sevilla.
Durante su etapa sevillana, Diego Velázquez desarrolló ampliamente los bodegones, así como escenas de taberna o escenas de cocina y cuadros religiosos. En todo, Velázquez hacía gala de un naturalismo tenebrista de gran factura que le mereció amplio reconocimiento.
De esta etapa, de hecho, es su celebrado lienzo El aguador de Sevilla, que le dio una importante proyección profesional. Este naturalismo de Velázquez dialogaba con los grandes maestros Caravaggio y Ribera, representantes de esta tendencia de la pintura que alcanzaba niveles nunca antes explorados.
Respuesta:
Diego Rodríguez de Silva y Velázquez, mejor conocido como Diego Velázquez, nació en Sevilla en el año 1599. De abuelos portugueses, fue hijo de Juan Rodríguez de Silva, y de la sevillana Jerónima Velázquez.
La formación artística de Diego Velázquez transcurrió mayormente en su ciudad natal, Sevilla. Allí recibió clases de dos importantes maestros. Aparentemente, el primero fue Francisco de Herrera. Después, ingresó al taller del maestro Francisco Pacheco, quien fue una figura fundamental en su vida y posterior desempeño.
De hecho, en 1618 se casó con la hija de su maestro, Juana Pacheco, cuando aún no cumplía los 19 años de edad. Con ella tuvo dos hijas, Francisca e Ignacia, también nacidas en la ciudad de Sevilla.
Durante su etapa sevillana, Diego Velázquez desarrolló ampliamente los bodegones, así como escenas de taberna o escenas de cocina y cuadros religiosos. En todo, Velázquez hacía gala de un naturalismo tenebrista de gran factura que le mereció amplio reconocimiento.
De esta etapa, de hecho, es su celebrado lienzo El aguador de Sevilla, que le dio una importante proyección profesional. Este naturalismo de Velázquez dialogaba con los grandes maestros Caravaggio y Ribera, representantes de esta tendencia de la pintura que alcanzaba niveles nunca antes explorados.