quienes apoyaban el concertaje
Respuestas a la pregunta
Contestado por
12
El concertajeLos trabajadores o “peones” vivían en las haciendas
con sus familias. Se “concertaban” (comprometían)
con los dueños, los “patrones” para el
trabajo. Por eso se llamaban “conciertos”. Tenían
un salario, pero nunca lo recibían, porque estaban
endeudados con los patrones. Los peones pedían
adelantos en dinero al patrón para poder pagar impuestos
y compromisos religiosos, como bautizos,
matrimonios, entierros y otros.
La relación entre peones y patrones era libre
solo en teoría. En realidad era una forma de trabajo
obligatorio, ya que el patrón podía encarcelar al
peón para que pagara la deuda. A veces, los peones
recibían del hacendado una porción de tierra,
el “huasipungo”, que lo trabajaban con su familia.
Por ello se llamaban “huasipungueros”. Las deudas
no terminaban ni con la muerte del peón concierto.
Pasaban a su viuda y a sus hijos.
El trabajador estaba sometido al patrón, que contaba
con el apoyo del clero y las autoridades del Estado.
El cura párroco predicaba la sumisión y cobraba
por los servicios religiosos que perpetuaban
la deuda. El teniente político de la parroquia y otras
autoridades podían mandar a la cárcel a quienes no
pagaban la deuda. Había concertaje en todo el país,
pero era más fuerte en la Sierra.
con sus familias. Se “concertaban” (comprometían)
con los dueños, los “patrones” para el
trabajo. Por eso se llamaban “conciertos”. Tenían
un salario, pero nunca lo recibían, porque estaban
endeudados con los patrones. Los peones pedían
adelantos en dinero al patrón para poder pagar impuestos
y compromisos religiosos, como bautizos,
matrimonios, entierros y otros.
La relación entre peones y patrones era libre
solo en teoría. En realidad era una forma de trabajo
obligatorio, ya que el patrón podía encarcelar al
peón para que pagara la deuda. A veces, los peones
recibían del hacendado una porción de tierra,
el “huasipungo”, que lo trabajaban con su familia.
Por ello se llamaban “huasipungueros”. Las deudas
no terminaban ni con la muerte del peón concierto.
Pasaban a su viuda y a sus hijos.
El trabajador estaba sometido al patrón, que contaba
con el apoyo del clero y las autoridades del Estado.
El cura párroco predicaba la sumisión y cobraba
por los servicios religiosos que perpetuaban
la deuda. El teniente político de la parroquia y otras
autoridades podían mandar a la cárcel a quienes no
pagaban la deuda. Había concertaje en todo el país,
pero era más fuerte en la Sierra.
Otras preguntas