Qué valores éticos podemos encontrar en el descubrimiento de América
Respuestas a la pregunta
Respuesta:En las Indias recién descubiertas acabó haciéndose evidente un contraste de contenidos entre la reflexión ética de los grandes tratadistas y la
moral vivida por los hombres de armas, entre lo que vamos a llamar Etica
de la Conquista y lo que denominaremos Moral de los conquistadora
También se dio una ruptura entre los principios proclamados como
buenos y los procedimientos que, de modo pragmático, cada conquistador
consideró eficaces para el logro de sus objetivos. Esta distancia entre el
bien que se pretende y el mal que se practica es consubstancial con la naturaleza humana. Pero no decimos toda la verdad si no añadimos que
también funcionó el hiato profundo entre las exigencias de una noble fi- nalidad —la fundación de nuevos reinos para la Corona de España en el
marco de una utopía cristiana— y las calidades altamente meritorias de
unos hechos sobresalientes. En el fenómeno histórico conocido como la
conquista de América se revelan tanto la grandeza de los ideales como la
servidumbre de los comportamientos.
El conquistador o mílite indiano procedía de un ambiente convulso de
ideas encontradas donde ninguna actitud era, en sí misma, absolutamente
buena o mala. Cada español podía elegir entre varias opciones para la legitimación de su conducta. Y así, sería de extraordinario interés para los
Reyes Católicos y para sus sucesores la lijación. de una vez por todas. de
cual venia siendo la teoría ética que, de hecho, predominaba en la conciencia del conquistador o mflite indiano en el marco de las demás teorías
a su alcance.
Explicación:
Respuesta:
En las Indias recién descubiertas acabó haciéndose evidente un contraste de contenidos entre la reflexión ética de los grandes tratadistas y la
moral vivida por los hombres de armas, entre lo que vamos a llamar Etica
de la Conquista y lo que denominaremos Moral de los conquistadora
También se dio una ruptura entre los principios proclamados como
buenos y los procedimientos que, de modo pragmático, cada conquistador
consideró eficaces para el logro de sus objetivos. Esta distancia entre el
bien que se pretende y el mal que se practica es consubstancial con la naturaleza humana. Pero no decimos toda la verdad si no añadimos que
también funcionó el hiato profundo entre las exigencias de una noble fi- nalidad —la fundación de nuevos reinos para la Corona de España en el
marco de una utopía cristiana— y las calidades altamente meritorias de
unos hechos sobresalientes. En el fenómeno histórico conocido como la
conquista de América se revelan tanto la grandeza de los ideales como la
servidumbre de los comportamientos.
El conquistador o mílite indiano procedía de un ambiente convulso de
ideas encontradas donde ninguna actitud era, en sí misma, absolutamente
buena o mala. Cada español podía elegir entre varias opciones para la legitimación de su conducta. Y así, sería de extraordinario interés para los
Reyes Católicos y para sus sucesores la lijación. de una vez por todas. de
cual venia siendo la teoría ética que, de hecho, predominaba en la conciencia del conquistador o mflite indiano en el marco de las demás teorías
a su alcance.
Explicación: