que sugerencias podrías aportar para hacer frente a situaciones que te incomodan
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Aprende a gestionar los silencios
Los silencios no siempre tienen que ser incómodos. Dependiendo del momento es importante manejar lo que decimos y cuándo vamos a decirlo.
Aunque sí es cierto que hay momentos en los que no decir nada genera un momento de tensión e incomodidad en la conversación, en otros escenarios guardar silencio representa una actitud de comprensión íntima entre los participantes.
Por ejemplo, cuando nos hacen una pregunta que no esperábamos y guardamos silencio en lugar de responder, el ambiente se puede tornar tenso, mientras que cuando alguien se está desahogando explicando sus experiencias negativas, que pasen varios segundos en los que nadie dice nada es natural y esperable.
Lo mejor en estos casos será ser asertivos y decir cómo te sientes ante una pregunta que te genere dudas. Eso sí, siempre de una manera cortés y sin dar señales de desagrado; ten en cuenta que tal vez la otra persona no trató de incomodarte.