que sucede en el cuento el gato negro
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Un asesino nos cuenta desde su celda una de sus espeluznantes vivencias. Cuenta que él era un hombre de buen carácter, se casó joven, con una mujer complaciente, y a ambos les encantaban los animales, por lo que tenían pájaros, peces, perros y un gato negro, que era su preferido. Sin embargo, los gatos suelen albergar los espíritus de las brujas.
Gradualmente, el hombre va modificando su carácter y se vuelve cada vez más violento, se emborracha y pega a su mujer y animales. Una noche, hastiado, le saca un ojo a su gato en un ataque de rabia. Y poco después decide ahorcarlo en un árbol cercano a la casa. A los pocos días su casa se incendia en extrañas circunstancias y de los despojos solo queda una pared en pie. Cuando el hombre se acerca, ve que en esa pared ha quedado dibujada la imagen de un gato atado a una soga. Se asusta, pero asume, de forma racional, que alguien tuvo que tirar al gato dentro de la casa para avisar del fuego y el animal quedó sepultado allí y dejó, por ello, su huella.
El hombre sigue su vida junto a su mujer y, una noche, en una taberna encuentra otro gato, igual al anterior, pero con una mancha blanca en el lomo como única diferencia. Se lo lleva a su casa en un arrebato y una vez allí, se percata de que le falta un ojo, igual que al anterior. Esto le recuerda al otro gato y hace que lo aborrezca. El gato, sin embargo, está continuamente rozándose con él, hasta el punto que le hace tropezar continuamente, y tiene la manía de acurrucarse sobre su pecho a la altura del corazón. El hombre lo detesta. Un día, bajando al sótano, el gato le hace tropezar. El hombre se enfada tanto que alza un hacha para matarlo, pero su mujer lo detiene. El hombre, loco de rabia, clava el hacha en la cabeza de su mujer acabando con su vida.
Tras el asesinato decide ocultar el cadáver emparedándolo en una pared del sótano. Lo oculta en la pared y se afana en hacer un buen trabajo para dejar la pared perfecta. La policía no tarda en hacer presencia en la casa y le interroga, inspeccionan toda la casa pero no encuentran nada que le inculpe. Vuelven otro día y bajan al sótano en compañía del narrador y asesino, no ven nada raro, pero, cuando ya se iban, y el asesino iba diciendo que las paredes de la casa eran muy fuertes, en una especie de autosabotaje inconsciente. Se oyen unos gemidos, como el sollozo de un bebé. Los policías comienzan a golpear la pared hasta tirarla abajo y allí estaba el cadáver y junto al cadáver, el gato, al que había emparedado dentro sin darse cuenta.
Explicación:
Espero que te sirva de algo ;)