¿Que puedo comer si no tengo gusto ni olfato?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Según la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (Seorl-CCC), en los últimos días, son muchos los pacientes afectados por la CoVid-19 que manifiestan alteraciones del olfato y del gusto (anosmia, hiposmia, ageusia o disgeusia). Por otro lado, el Ministerio de Sanidad, en su informe técnico, muestra la hipogeusia (disminución del sentido del gusto) y la hiposmia (disminución del sentido del olfato) entre los síntomas registrados en estudios preliminares del CoVid-19 en China.
Explicación:
En caso de hiposmia y/o hipogeusia (pérdida parcial del olfato y/o del gusto):
- Aumentar la condimentación de los alimentos con especias y/o hierbas aromáticas (menta, albahaca, orégano, romero, tomillo, laurel, hinojo), ajo, zumos y pieles de cítricos, sal (con cuidado de no echar medio salero y siempre que no esta esté específicamente contraindicada) o potenciadores del sabor (cubos de caldo).
- Elegir sabores fuertes, como el queso curado o el jamón, y mezclarlos con cremas o verduras para potenciar su sabor.
- Elegir alimentos líquidos o jugosos, ya que se favorece la disolución de los sabores y la entrada de estos en las papilas gustativas.
- Elegir alimentos templados o calientes. Algunos estudios concluyen que aquellos alimentos con sabor dulce, amargo o umami podrían verse potenciados si se consumen en caliente, debido a una mayor reacción de los canales TRPM5 de nuestras papilas gustativas1. Además, si nos basamos simplemente en la termodinámica, en caliente los alimentos aumentan la liberación de compuestos volátiles y eso potencia el componente olfativo del sabor.
- Tener en cuenta la presentación de los platos, la forma, el color y la textura de las elaboraciones. Trabajar los sentidos que no se ven afectados, como el visual, el auditivo y el tacto, será de gran importancia.
En caso pérdida total de olfato y/o de gusto (ageusia y/o anosmia):
- Procurar seguir manteniendo una alimentación saludable y equilibrada, cuidando la presentación, el ambiente, las elaboraciones conocidas donde el recuerdo de su sabor pueda ayudar a imaginarlo… hasta recuperarse por completo de la enfermedad causante de dichos síntomas.
- Estar atentos a las fechas de caducidad y al aspecto visual de los alimentos, ya que al no poder oler ni percibir su sabor no podríamos detectar aquellos aromas y sabores que nos indican que un alimento está en mal estado. Asimismo, estar atentos durante el cocinado de que no se nos queme la comida o dejemos el fuego encendido sin percibirlo.