¿Qué podemos hacer para alejar el pecado de nuestra vida?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
HOLA ;)
Explicación:
1: IR A MISA
2: CONFESANDONOS
3: NO COMETIENDO PECADOS
Respuesta:
1. Reconoce tu condición de pecador.
El fracaso de muchos cristianos radica en que no fueron humildes para reconocer sus debilidades, nunca confesaron sus pecados, y nunca fueron confrontados. “El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia” (Proverbios 28:13).
Nada debería ser excusa para no confesar tus pecados ante el Señor y tus hermanos. El inicio de una vida cristiana llena de fruto comienza cuando vamos a Cristo en arrepentimiento y fe, dejando que su gracia nos transforme.
Incluso si piensas que no tienes problemas con algún pecado habitual, debes reconocer que somos vulnerables si nos descuidamos. Si no tratamos con los pecados ocultos en nuestras vidas, ponemos en duda nuestra certeza de salvación (1 Jn. 3:8-10).
2. Practica las disciplinas espirituales.
Seguramente ya sabes que necesitas orar, leer la Biblia, congregarte, ayunar, etc. Pero parece que cada día son más los cristianos que no son constantes en las disciplinas espirituales que tanto necesitamos.
La Biblia nos habla de muchos hombres piadosos que tenían comunión con Dios, pero Jesús es el mejor ejemplo de todos. Los evangelios nos muestra a Jesús en acción, no solo sanando enfermos y liberando a los cautivos, sino practicando los disciplinas espirituales.
3. Reconoce tus zonas de peligro.
Debemos ser sabios al reconocer nuestras debilidades, o, dicho de otra forma, saber cuáles son nuestras zonas de peligro (Mateo 26:41; 1 Pedro 5:8).
Así como Chernobyl es una zona de riesgo para quienes estén cerca, rodeada de carteles que dicen “¡Peligro!”, nosotros también debemos cuidarnos de lo que nos hace daño. Hay escenarios, situaciones, estados de ánimo, lugares, y tiempo en donde somos más vulnerables a las tentaciones.
Si reconocemos nuestras debilidades o zonas de peligro, podemos tomar medidas drásticas para evitar caer en los deseos de la carne.
Explicación: