que podemos aprender de los dioses falsos y del dios verdadero?
Respuestas a la pregunta
Los falsos son como los de la mitología griegas la diosa de la hermosura atenea medusa entre otros y el verdadero es Dios el que creó todo en 7 días espero te sirva
Respuesta:Reflexión: “Los falsos dioses y el verdadero Dios”
COMPARTIR EN
Por Iglesia Evangelio Vivo
19 enero, 2017
0 1281
Buscar
“Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo. Ciertamente, en otro tiempo, no conociendo a Dios, servíais a los que por naturaleza no son dioses…” (Gálatas 4:7-8)
Si te pregunto, ¿Has servido alguna vez a otros dioses? Seguramente pensarás, como es que te pregunto, algo así en pleno siglo 21, donde por supuesto, ya nadie tiene una creencia mitológica, como eran en tiempos de Grecia, o Roma, con sus decenas de “dioses” y “divinidades”.
Pero no creas que el corazón humano ha cambiado mucho en 2000 años. Si bien hoy nadie cree en los dioses de la mitología, pero sin embargo son “esclavos”, son siervos de “otros dioses”. Servir, significa entregar toda nuestra voluntad, esfuerzo, capacidad y trabajo… a alguien.
Algunos ejemplos: Si dedicas toda tu vida a tu carrera profesional o trabajo, y te duermes pensando en ello, y al día siguiente, te levantas, con el solo pensamiento de progresar, de capacitarte, y de triunfar en dicha vocación… ¿acaso, eso no absorbe TODA TU VIDA, y eres esclavo de esos pensamientos. ?
Y si por el contrario, dedicas tu vida a los placeres de esta vida, y te entregas a la lujuria, y vicios que este mundo te ofrece, de modo que, en forma continua tus pensamientos, se basan en como procurar sacar mejor partido del goce mundano… ¿ Acaso no eres esclavo de esos sentimientos ?
Puede pasar también, que tu vida sea desdichada, y que al parecer no tenga a tus propios ojos solución alguna, ni que puedas cambiar ninguna de tus circunstancias doloras, y te resignas a pasar todo el tiempo, pensando que no ha salida, ni solución… ¿Acaso no te has convertido en esclavo de tus derrotas.?
Podríamos multiplicar situaciones, estados de ánimo, circunstancias, proyectos… pero todas, bajo la pregunta de un común denominador: ¿Dónde se encuentra Dios en cada una de esas situaciones, estados de ánimo, circunstancias y proyectos?
Como dice el versículo de la Palabra de Dios que estamos considerando: ” en otro tiempo, no conociendo a Dios, servíais a los que por naturaleza no son dioses.” Cuando no conocemos al “verdadero Dios”, toda nuestra vida tiene un sentido y un propósito que no es el verdadero.
Si no conocemos al “verdadero Dios”, dedicaremos todos los años de nuestra vida, a cosas que pueden ser buenas o malas, desde el punto de vista humano, pero que por naturaleza son “falsos dioses”.
Sin embargo nosotros tenemos en nuestra vida, todas estas cosas “como la razón y propósitos de nuestra existencia”, convirtiéndose en definitiva (aunque no lo admitamos) “en nuestros dioses”… y nosotros en siervos de ellos, las 24 horas, los 365 días del año.
¿Cómo puedo entonces conocer y servir al verdadero Dios?
Solo en Cristo y nada más que en Cristo. El Hijo de Dios, vino a este mundo, a destruir y deshacer en la cruz del calvario, a aquellas cosas que por naturaleza “no son dioses” pero que sin embargo, el ser humano dedica su vida entera: AL PECADO.
Estimado amigo/a:
El pecado te esclaviza, pero si crees en Cristo Él te libera. Los “falsos dioses” de este mundo se llevan lo mejor de tu vida, pero en Cristo descubrirás “en que consiste la verdadera vida”. La Palabra de Dios, nos dice que en Cristo, al arrepentirnos de nuestros pecados, y poniendo nuestra fe en El cómo nuestro salvador pasamos de “esclavos del pecado” a ser hechos “hijos de Dios”.
¿A qué darás lo mejor de tu vida, a “falsos dioses” que te esclavizan, o al “verdadero Dios” que quiere darte la vida que hay en su Hijo Jesucristo? ¿En qué consiste la vida?
“Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.” (Juan 17:3)
Deja los “falsos dioses” y que en el día de hoy, TODA TU VIDA, sea puesta en las manos del solo Dios verdadero, que te ofrece vida eterna en su Hijo Jesucristo. Que así sea!
Explicación: