Que pasó después de la Primera Guerra Mundial en relación a la explicación de minerales en Bolivia
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Si existe un sector organizado cuya oposición recurrente ha preocupado a los gobernantes, ése es el de los mineros. La revisión de las huelgas y batallas de todo tipo en las que se han visto comprometidos, su fuerza de arrastre ante los demás sindicatos, su importancia en la COB es impresionante y constituye la evidencia de su poder. Y, si aun fuera necesaria una otra prueba de su vigor, se podría mencionar la inaudita capacidad de recuperación de sus sindicatos, después que las sangrientas represiones, los despidos, apresamientos y exilios habían diezmado sus dirigentes. ¿Por qué representan un peligro tal que todos los gobiernos han buscado ya sea controlarlos o ya sea derrotarlos? Pero, también, ¿por qué se ven obligados a recomenzar constantemente un combate que nunca termina? Estas son las principales interrogantes de este capítulo.
2 Se puede decir, en breve, que si la Bolivia del 52 es socialmente un país rural, económicamente, es un país minero. Toda su historia está signada por un destino minero, desde la extraordinaria epopeya del Cerro Rico de Potosí, que hizo del Alto Perú (después Bolivia) el principal productor de plata durante tres siglos y que forjó la leyenda de su riqueza, hasta la explotación de las vetas estañiferas. Destino paradojal de un país cuyos tesoros parecen escapárseles a sus habitantes, condenado a una reiterada pobreza y agotado, se diría, después de haber cavado tanto. “Entonces cualquier piedra del cerro era todo plata, hoy todo es piedra,” se quejaba el cronista Arzans de Orsúa y Vela (citado en Francovich 1980: 67). La misma queja podría ser retomada hoy en día, pues parece que la riqueza engendrada por 80 años de explotación del estaño ha sido completamente agotada sin dejar ningún fruto.
3 La producción masiva de estaño arranca a principios del siglo xx, cuando aumentan los precios del estaño en el mercado mundial. Hasta 1929, Bolivia cubre un cuarto de la producción mundial, una quinta parte hasta 1949 y, todavía, una sexta en 1952. En 1950, todavía ocupa el segundo lugar entre los productores, después de Malasia.
4 Paralelamente a los minerales de estaño, también se extraen minerales de zinc, plomo, cobre, antimonio, tungsteno, bismuto, etcétera. Pero, en ese conjunto, la parte de los minerales de estaño constituye siempre la más importante, tanto en las cantidades extraídas como en el valor de las exportaciones. El estaño es, pues, el principal producto de exportación del país y ningún otro producto logra disputarle su supremacía. Entre 1912 y 1952, la proporción de las exportaciones mineras oscila entre el 81 y el 98,52 % (1948): la del sólo estaño nunca es inferior al 55 %; llega hasta el 74.4 % en 1931.
5 Las minas se encuentran en el Altiplano y en la cordillera oriental de Los Andes, al interior de una franja de más o menos 90 km. de ancho y 750 km. de largo, que se extiende desde el norte del Lago Titicaca hasta la frontera con la Argentina. Casi todas las principales ciudades del país (La Paz, Oruro, Potosí, Sucre) se encuentran situadas en esa franja. Cochabamba está cerca, en el borde oriental de la cordillera.
Explicación: