¿Qué países participaron de la encuesta sobre la diversidad biológica?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La biodiversidad animal, vegetal y marina constituye el "capital natural" que permite que nuestros ecosistemas funcionen y las economías se mantengan productivas. Pero el mundo está experimentando una pérdida enorme de biodiversidad. El ritmo de la deforestación ha disminuido a nivel mundial desde la década de los noventa, pero aún sigue siendo alto con una tasa anual de unos 13 millones de hectáreas, afectando a hábitats de animales y plantas críticos. El mundo ha perdido también aproximadamente el 40 % de los arrecifes de coral en las aguas cálidas desde los años ochenta. El Índice Planeta Vivo (IPV), (i) que mide las tendencias de ciertas poblaciones de especies, indica una disminución general del 52 % durante los últimos 40 años, con pérdidas considerables en los países en desarrollo tropicales, principalmente como resultado de las pérdidas de hábitats, la degradación y la sobreexplotación.
La pérdida de biodiversidad tiene efectos negativos sobre los medios de subsistencia, el abastecimiento de agua, la seguridad alimentaria y la resiliencia a los fenómenos extremos. Sus consecuencias afectan al 78 % de los habitantes rurales que se encuentran en situación de pobreza extrema en el mundo, muchos de los cuales dependen de los ecosistemas y los bienes que estos producen para poder subsistir. El Banco Mundial estima que los delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente (i) causan daños por más de USD 70 000 millones anuales en los países en desarrollo. (i) La pérdida de arrecifes de coral ha tenido consecuencias físicas y económicas importantes para más de 350 millones de personas que viven en las zonas costeras, disminuyendo la protección del litoral y el hábitat de los peces. La deforestación y la transformación del suelo contribuyen con alrededor del 30 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, y la pérdida de biodiversidad disminuye la resiliencia de los ecosistemas frente al cambio climático y otras perturbaciones.
Estrategia
El Banco Mundial es una de las principales entidades de financiamiento internacional para propósitos de conservación y uso sostenible de la biodiversidad, con una cartera de 241 proyectos por valor de más de USD 1250 millones en los 10 años transcurridos entre los ejercicios de 2006 y 2016.
Con la aplicación de sus políticas de salvaguardia, que acaban de ser actualizadas para reforzar los resultados de desarrollo, (i) el Banco Mundial incorpora también las cuestiones relativas a la diversidad biológica en todos sus proyectos de inversión.
El Banco Mundial ayuda a los países a adoptar políticas en que se valore la biodiversidad como un factor clave del desarrollo sostenible, (i) a trabajar en todos los sectores económicos y a mejorar su gestión de los recursos naturales para aumentar la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica. El Banco invierte en aspectos de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos —como la gestión de cuencas hidrográficas, la ordenación integrada de las zonas costeras (i) y las zonas protegidas— que son importantes para conseguir los objetivos de desarrollo de los países. Además, estos últimos reciben orientación del Banco en sus esfuerzos para encontrar maneras de generar ingresos a partir de la biodiversidad —como el turismo o los pagos de servicios ambientales— y con los cuales cubrirán el costo de la gestión de los recursos de diversidad biológica y mejorarán sus economías. El Grupo Banco Mundial colabora estrechamente con sus asociados en cuestiones como los delitos contra la vida silvestre, la gestión de los bosques y la protección de los océanos.
El Banco Mundial apoya cada vez más a sus países clientes en los esfuerzos por implementar un enfoque más integrado del paisaje que no se limite a las intervenciones en sectores aislados y tomar en consideración la resiliencia tanto de los ecosistemas como de los medios de subsistencia. Se entrega este respaldo porque se reconoce que es la medida más eficiente que se puede tomar dadas las interrelaciones complejas entre los diferentes componentes del capital natural y, lo que es más importante, porque se trata de una medida esencial para las comunidades que se desenvuelven en una realidad en que todo está vinculado: es decir, en el paisaje.
Los proyectos de diversidad biológica del Banco Mundial abarcan desde apoyo a zonas protegidas, fortalecimiento institucional, integración de la conservación de la biodiversidad en los paisajes productivos, diseño de sistemas de financiamiento para la conservación sostenibles a promoción de actividades turísticas basadas en la naturaleza (PDF, en inglés) y medidas para combatir el crimen contra la vida silvestre.