¿que ocurre actualmente en europa en relacion con la xenofobia y el racismo?
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El fascismo causó estragos en Europa en los años treinta, y cuando acabó la segunda guerra mundial, en 1945, los vestigios de los partidos de extrema derecha volvieron a hacer aparición en los márgenes de la escena política. En los años ochenta, cuando todo aquello había comenzado a caer en el olvido, algunos de esos partidos empezaron a nutrirse de votos de protesta al desatarse la polémica en torno a la inmigración, avivada por la prensa sensacionalista en busca de noticias fáciles.
En el nuevo milenio el panorama ha cambiado radicalmente en Europa con el nuevo racismo político. En primer lugar, la conspiración judía y la negación del Holocausto han dejado paso al choque de civilizaciones y al fundamentalismo islámico. En segundo lugar, los partidos fascistas tradicionales de derechas han optado por moderar su mensaje y el perfil de sus simpatizantes y profesar un "fascismo edulcorado". Los que antes eran partidos puramente fascistas son ahora partidos populistas de derechas cuyos adeptos constituyen una variada grey que engloba desde personas de ideología fascista hasta racistas, xenófobos y los blancos alienados de clase trabajadora. Ahora se expresan en términos de nación, tradición, soberanía y comunidad, en vez de eugenesia, exterminio y patria. En tercer lugar, estos partidos intentan deliberadamente reducir las diferencias que los separan de los partidos democráticos tradicionales rebajando el tono de su discurso, al tiempo que los partidos tradicionales se apropian de esas expresiones de gran efecto con fines electorales y propician así que el nuevo lenguaje racista se deslice en el discurso moderado. Alimentados por la expansión de Europa hacia el Este, que no ha contribuido a fomentar la tolerancia, los prejuicios reprimidos durante decenios por los regímenes comunistas han vuelto a aflorar y sirven de argumento a nuevos y estrafalarios políticos y partidos de ideología racista, xenófoba e intolerante.
Un ejemplo del éxito de esas nuevas estrategias en Europa es la promulgación de leyes para garantizar la tolerancia en un continente que antes la prodigaba. Otro es que la ultraderecha cuenta ahora con el respaldo numérico y la confianza suficientes para constituir oficialmente un grupo político en Europa. La creación en 2007 del Grupo Identidad, Tradición, Soberanía (ITS) en el Parlamento Europeo permitió asociarse a los partidos ultraderechistas y racistas de Austria, Bélgica, Francia e Italia, así como de Bulgaria y Rumania-- los dos últimos países en ingresar en la Unión Europea -- , a los que se unió un eurodiputado independiente expulsado del United Kingdom Independence Party no por sus ideas sino por estar acusado de fraude en la percepción de prestaciones sociales.
El hecho de que entre los 785 eurodiputados actuales haya más políticos racistas que representantes de los 15 millones de personas que viven en países de la Unión Europea que pertenecen a minorías étnicas o son nacionales de terceros países y que, considerados conjuntamente, constituirían el octavo "país" con más población de los 27 países de la Unión Europea, es indicativo de las tendencias imperantes. Entre los 19 miembros del Grupo ITS figuran algunos de los principales referentes de los partidos de extrema derecha de Europa y, a pesar de la retórica, sus verdaderas opiniones son bastante evidentes. El líder del Grupo ITS es el eurodiputado francés Bruno Gollnisch, número dos del Front National de Jean-Marie Le Pen, procesado en enero de 2007 por negar el Holocausto. Andreas Moelzer fue el responsable del éxito del Partido Liberal de Austria (FPÖ) de Jörg Haider, el mismo Haider que se negó a condenar un atentado terrorista que acabó con la vida de cuatro romaníes. Frank Vanhecke es el líder del partido flamenco Vlaams Belang, que defiende que los inmigrantes deben integrarse totalmente en la cultura occidental o ser repatriados. Sin embargo, los tres están tratando de reposicionar al Grupo ITS y aseguran que se inscribe en la corriente mayoritaria de la política europea. Un indicio de ese cambio de imagen es que finalmente decidieron rechazar el nombre de "Europa de las Patrias", que evoca a Hitler y a los nazis, para su grupo, a pesar de que utilizaron ese nombre en el boletín publicado conjuntamente por la mayoría de sus integrantes actuales.
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