Que objeto se puede comparar con una célula eucarionte y sus funciones
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
"Formas y funciones de la célula"
Situemos el tema:
"La estructura de la vida"
Todos los seres vivos realizan distintas actividades a diario para poder alimentarse, crecer, desarrollarse y reproducirse.
De igual modo, los seres humanos también llevamos a cabo un sinnúmero de
funciones, para satisfacer el mismo tipo de necesidades, y así, continuar la
vida en nuestro planeta.
Podríamos preguntarnos: ¿Qué tenemos los seres humanos en común con un
árbol, una larva de mariposa y un caballo?, ¡las células!
Desde una larva hasta un ser humano, los seres vivientes estamos formados
por la misma estructura: las células. Algunas formas de vida muy sencillas se
componen de una sola célula, como es el caso de las bacterias, algunas de las
cuales, pueden poner en peligro nuestra salud; un gusano pequeño, en cambio, tiene alrededor de mil células, y un ser humano adulto, millones de ellas.
Las células son unidades que pueden alimentarse, crecer, y reproducirse,
cualidades que les permiten agruparse formando distintos tipos de tejidos y
estructuras organizadas, como la piel y los huesos.
De igual modo, también forman órganos diversos e importantes, como el corazón
o el cerebro. Así, los órganos presentes en nuestro organismo, realizan distintas
funciones en conjunto, permitiendo nuestra supervivencia. De la misma manera,
en cada actividad que realizamos, millones de células entran en acción.
No somos los únicos que trabajamos para vivir, también, eso le sucede a
nuestras células.
¿Qué es la célula?
Comenzaremos por de¿ nir a la célula como la unidad más pequeña de la materia viva, que tiene la
capacidad de realizar todas las funciones de los
seres vivos. Podemos imaginarla como la primera
piedra de una casa; como la unidad básica del
organismo, capaz de realizar todas las funciones
necesarias para el diario vivir: crecer, reproducirse, respirar, nutrirse, responder a estímulos y
diferenciarse unas de otras.
La célula tiene la capacidad de trabajar en forma independiente y es la base de los seres vivos, de ahí proviene su gran importancia. La mayoría de las células son microscópicas, pero algunas, como la yema del huevo de gallina, miden casi 4 cm de diámetro; algunas células nerviosas de la jirafa, pueden medir hasta 4 m de largo.
Todos los organismos vivos poseen células, aun cuando sea sólo una.
Algunos organismos microscópicos, como las bacterias y protozoos, se constituyen de una célula y, por esto, se llaman unicelulares. Ellos son capaces de alimentarse, crecer y reproducirse, funciones que les han permitido mantenerse como seres vivos durante millones de años.
Otros seres vivos, como los animales, aves, peces o plantas, están formados por muchos millones de células, y se denominan pluricelulares. Los diferentes tipos de células que constituyen a los organismos pluricelulares, se agrupan para formar tejidos, órganos y sistemas. Por ejemplo, en las plantas hay ciertas células que se organizan para formar tejidos que transportan el agua desde la raíces hasta las hojas. Otras células, en cambio, cumplen funciones distintas, como sucede con las de la función reproductora.
En el caso de los animales o el ser humano, las células se reúnen y se organizan para formar sistemas más complejos, en los que órganos como el cerebro, el corazón o el hígado, funcionan como parte de un conjunto, posibilitando el desarrollo y la supervivencia del organismo vivo.
La biología celular es la disciplina que estudia la estructura y el funcionamiento de las células. Ello ha sido posible gracias al desarrollo de instrumentos como el microscopio electrónico, capaz de aumentar 150 mil veces el tamaño de una célula.